Ayer se estrenó la nueva cinta de Pedro Almodóvar, tras alzarse con el León de Oro en el pasado festival de Venecia. Si bien el director manchego me gusta, suelo ser cauto a la hora de ver sus nuevas propuestas, puesto que suele alternar una de cal con otra de arena. En este caso, la apuesta salió bien puesto que me gustó su nuevo film, pero con algún pequeño matiz tal y como pienso explicar en los siguientes párrafos. Pero si puedo adelantar, que es una muy buena película y que me sorprendió gratamente.
Además de las actrices arriba mencionadas, en el reparto también nos encontramos con John Turturro dando vida a Damian, antiguo amante de ambas; Juan Diego Botto como un fotógrafo de guerra; Raúl Arévalo en el rol de un jesuita o Alessandro Nivola que presta sus rasgos a Flannery, un policía que investiga la muerte de Martha.
He de decir que solo había visto un tráiler antes de ver la nueva propuesta del director manchego, y que no sabía nada de su argumento. Algo que suelo hacer cada vez que voy a ver cada una de sus nuevas cintas, lo que a veces es bueno como en el caso de Dolor y gloria, de las mejores obras de su filmografía, pero también te puede salir mal como en Madres paralelas. Pero en esta ocasión tenía un punto más de ganas de verla, puesto que el premio obtenido en Venecia le hizo ganar enteros.
La película está muy bien, y tiene en ambas actrices su mayor acierto. No sé cual de las dos está mejor, puesto que ambas tienen sus momentos de lucimiento. De cara a los futuros Goya, las dos tienen más que aseguradas su candidatura, lo que no sé es quien irá por secundaria y quien por principal. Desde luego que el director de Volver acertó de pleno a la hora de ofrecer los dos roles a las dos, puesto que dan muestras de su talento en no pocas ocasiones.
El guion también resulta bastante interesante, y seguro que causará no pocos debates una vez acabe la proyección. Ya que no pocos espectadores, entre los que me incluyo, se van a plantear que harían ellos en el mismo caso, de si serían capaces de ayudar a una persona a la hora de cometer el acto que está pensando hacer, con las consecuencias morales que ello implica. Tema que también se forma parte de otros filmes como Mar adentro o Million dollar baby.
Buena parte del film se basa, como ya he dicho, en las conversaciones que mantienen ambas intérpretes, por lo que el uso de interiores está más que presente a lo largo del metraje, si bien también nos vamos a encontrar con no pocos instantes que también ocurren en espacios más abiertos, como la terraza de un restaurante o un bosque.
Pero no todo es perfecto, puesto que hay un par de cosas que me chirriaron y no me acabaron de convencer. Si tal vez Almodóvar las hubiera corregido, podríamos estar hablando de un resultado final más redondo que el que nos ha acabado llegando. Ojo, no digo que estén mal rodados ni mucho menos, pero si los hubiera resuelto de otra forma, tal vez me hubiera acabado gustando más de lo que ha acabado haciéndolo.
El primer punto que no me acabó de gustar, fueron un par de flashbacks relacionados con el pasado del personaje de Martha. Hubieran quedado mejor si los hubiera narrado, en vez de cortar lo que estamos viendo, ya que hubiera acabado dando lo mismo. Tal vez sea mejor verlo apoyado por imágenes, pero la narración oral también hubiera quedado bien.
El segundo detalle que me chirrió, es una constante en la filmografía del realizador manchego. Y es el meter una relación homosexual en la narración. Poco importa que la misma tenga relación con la trama o no, o si tiene importancia en lo que nos está contando. Aquí, en opinión de quien esto suscribe, resulta del todo innecesaria y no aporta nada a lo que nos está contando. Cierto es que dura un instante, pero se podía haber obviado y no hubiera pasado nada en absoluto.
Pero, como he dicho, son un par de instantes que no desmerecen en absoluto el resultado final. Tal y como he dicho antes, Almodóvar suele alternar aciertos con errores, lo que le ha llevado a tener una carrera irregular. Por fortuna, los aciertos suelen superar a los errores, pese a que estos sean bastante malos. Baste citar Los amantes pasajeros, sobre la que más vale correr un tupido velo.
La cinta tiene un buen ritmo, ya que no llega a las dos horas, por lo que casi desde que comienza va directa al grano. Todo el film es gente hablando, puede parecer pesado, pero no lo es en absoluto. Ignoro como es el material original, pero el realizador le ha sabido dar un buen toque y ha sabido darle su sello característico.
Tanto si os gusta Almodóvar, como si sois seguidores de ambas actrices, es una cinta que no debéis dejar pasar.
A continuación el tráiler:
Espero que os haya gustado la entrada de hoy.
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