Uno de los temas más recurrentes, para los escritores del género de terror es el del mundo de los espíritus. Los fantasmas, ya sean amistosos, como Casper, o malvados, suelen ser utilizados por los autores, a la hora de dar a luz a sus historias y alumbrar nuestras pesadillas. Uno de los métodos más utilizados, para contactar con estos seres sobrenaturales, suele ser la tabla de la ouija. Pero siempre que se utiliza, suele dar funestos resultados. Este tablero, así como un libro de terror, entre otros elementos, forman parte de la entrada de hoy.
Escrito por Carlos Sisi, la trama nos cuenta como una investigadora de lo paranormal y una creadora de un programa informático que capta sonidos del más allá, unirán sus fuerzas para investigar que se oculta tras el éxito de un libro de terror escrito por un autor, que parece inducir a la locura a todo aquel que lo lee y poner en práctica los rituales con ouija que se explican en el texto.
En principio, lo que promete ser una premisa más que interesante, no tarda en diluirse como un azucarillo en un vaso de agua. Lo que resulta una verdadera pena. Y más viniendo de quien viene, un autor que me ha hecho pasar muy buenos momentos con sus obras anteriores. El gran problema de este libro, es la gran descompensación que existe entre ambas partes de la obra. Ya que en la misma se pueden encontrar dos secciones bien diferenciadas: a la primera, la parte de terror, apenas se le puede poner un pero. Los instantes terroríficos están bien medidos, los sustos también, así como los momentos sangrientos y violentos.
Pero es en la segunda sección donde la novela entra en barrena. Aquí el autor introduce elementos de amor que no terminan de casar del todo con la historia. Estoy de acuerdo en que una historia de terror pueda tener partes de afecto, pero no que éste sea parte esencial de los acontecimientos, y que sea importante para la conclusión y devenir de los protagonistas. En una historia de terror, el cariño no tiene que poder derrotar a los fantasmas o seres sobrenaturales. Es como si Corín Tellado hubiese escrito una novela de terror, que queda descompensada. Y esto es lo que ha ocurrido aquí.
Es un libro que he tardado en leer debido a la gran acumulación que tengo de pendientes. Y que no me acababa de enganchar del todo, cuando empezaba a ponerse interesante, pum de repente se paraba. La trama avanzaba a trompicones, y en más de una ocasión pensé en abandonar su lectura. Pero soy de las personas que cuando empieza un libro, lo acaba.
Es un libro que me decepcionó, lo tenía todo para ser más que interesante pero acaba fallando. Los personajes están bien construídos, sus historias son interesantes, pero es en el elemento amoroso donde el autor falla. A mi no me terminó de convencer. Y es que el problema es que el libro lo venden como si fuera de terror, cuando no es así. Es más bien como una especie de manual, salvando las distancias, acerca de la vida y la muerte y de como enfrentarsé a la misma.
Un pequeño resbalón en una carrera que por ahora no me ha decepcionado, hasta que he leído Alma. Si os gustan las historias sobrenaturales, pero que a la vez tratan temas filosóficos, éste es vuestro libro.
martes, 25 de junio de 2019
miércoles, 5 de junio de 2019
película: X-Men: Fénix Oscura
El próximo viernes, se estrena en nuestras pantallas la última cinta de los mutantes liderados por el profesor Xavier, lo que supondrá el fin de contrato con Fox y su ingreso en el universo cinematográfico Marvel. Para su despedida, sus responsables han decidido adaptar una de las principales sagas del universo mutante. El resultado, pues ni bueno ni malo, tan solo regular, lo que resulta una pena. Los famosos superhéroes podían haberse despedido de la que fue su casa por la puerta grande. Pero no ha sido así. Desde aquí dar las gracias a la distribuidora, por proporcionarme los materiales a la hora de hacer esta reseña, así como su atención y amabilidad en el pase de prensa.
Escrita y dirigida por Simon Kinberg, la cinta nos cuenta como tras una misión de rescate en el espacio, Jean Grey, Sophie Turner, se ve sacudida por una fuerza cósmica que le otorgará grandes poderes. Una vez de vuelta a nuestro planeta, la joven tendrá que hacer frente no solo a unos poderes que escapan de su control, sino también averiguar que quiere de ella la misteriosa Vuk, Jessica Chastain.
Unas líneas más atrás hacía referencia al resultado final de la cinta, cuyo estreno se vio pospuesto debido al rodaje de nuevas escenas, lo que sin duda puede haber condicionado su devenir en la taquilla. Y es que el tercio final del film, así como su clímax, resulta caótico y sin nada de tensión o de emoción. Todo se resuelve de forma precipitada, como si se hubieran dado cuenta que se estaban quedando sin tiempo para contar todo lo que querían contar.
Lo que resulta una lástima, ya que hasta ese momento la cinta resultaba más o menos entretenida, con unas buenas interpretaciones y con una trama que, en mayor o menor medida, adaptaba el arco argumental de La saga de Fénix Oscura.
Tal y como ocurrió con la anterior entrega, X-Men: Apocalipsis, la cinta avanza a trompicones. Alterna momentos interesantes con otros tediosos, no sabe encontrar el tono adecuado. Va alternando entre la seriedad del universo DC, con los aspectos más ligeros de Marvel. El resultado es un film que queda por debajo de otras entregas del universo mutante. Aquí lo tenían todo a favor para haber cerrado por todo lo alto, pero han fallado una oportunidad de oro.
Lo mejor de la cinta son los personajes encarnados por McAvoy y Fassbender. En esta ocasión, la línea que separa a ambos de ser héroe y villano es más fina que nunca. Sobre todo en el caso de Xavier, cuyas intenciones, pese a ser buenas en un principio, no serán sino el anticipo del desastre que ocurrirá cuando Jean se vea poseída por la fuerza cósmica de Fénix.
Turner, pese a desempeñar un rol más o menos interesante, no termina de convencer del todo. En teoría tendría que interpretar a un personaje fuerte, a la vez que asustado por la dimensión de sus poderes. Pero desaprovecha la oportunidad, y su rol como Fénix parece más bien un adolescente enfadado y caprichoso, que cuando no salen las cosas como quiere da rienda suelta a su frustración. Pero con la salvedad, de que aquí su rabieta se puede llevar por delante a medio universo.
La película, además del tercio final caótico, adolece de otro gran problema. Y es que no aprovecha, ni saca partido del todo, a la villana interpretada por Chastain. La actriz hace lo que puede con un personaje plano, del que se podría haber sacado mucho más jugo. Casi en ningún momento se le puede considerar una verdadera amenaza, salvo en un determinado momento de la cinta. El resto del tiempo se dedica a hablar y hablar.
El film es irregular, pero por lo menos no resulta aburrido. Y algo que hay que agradecer es que su duración no llega a las dos horas, por lo que cuando uno se quiere dar cuenta, la cinta ha avanzado bastante.
Si os gustan las cintas de mutantes dadle una oportunidad. Pero no esperéis que esté a la altura de Logan o X-Men: Primera clase. Lo que aquí os vais a encontrar es algo en la línea de la anterior entrega. Es una producción que cumple, pero que da muestras de cansancio. Ahora, tan solo hay que esperar que la integración de los alumnos de Xavier y compañía, tengan un mejor recorrido en el universo cinematográfico de Marvel que en sus dos últimas entregas.
A continuación el tráiler:
X-Men:Fénix Oscura se estrena el próximo 7 de Junio.
Escrita y dirigida por Simon Kinberg, la cinta nos cuenta como tras una misión de rescate en el espacio, Jean Grey, Sophie Turner, se ve sacudida por una fuerza cósmica que le otorgará grandes poderes. Una vez de vuelta a nuestro planeta, la joven tendrá que hacer frente no solo a unos poderes que escapan de su control, sino también averiguar que quiere de ella la misteriosa Vuk, Jessica Chastain.
Unas líneas más atrás hacía referencia al resultado final de la cinta, cuyo estreno se vio pospuesto debido al rodaje de nuevas escenas, lo que sin duda puede haber condicionado su devenir en la taquilla. Y es que el tercio final del film, así como su clímax, resulta caótico y sin nada de tensión o de emoción. Todo se resuelve de forma precipitada, como si se hubieran dado cuenta que se estaban quedando sin tiempo para contar todo lo que querían contar.
Lo que resulta una lástima, ya que hasta ese momento la cinta resultaba más o menos entretenida, con unas buenas interpretaciones y con una trama que, en mayor o menor medida, adaptaba el arco argumental de La saga de Fénix Oscura.
Tal y como ocurrió con la anterior entrega, X-Men: Apocalipsis, la cinta avanza a trompicones. Alterna momentos interesantes con otros tediosos, no sabe encontrar el tono adecuado. Va alternando entre la seriedad del universo DC, con los aspectos más ligeros de Marvel. El resultado es un film que queda por debajo de otras entregas del universo mutante. Aquí lo tenían todo a favor para haber cerrado por todo lo alto, pero han fallado una oportunidad de oro.
Lo mejor de la cinta son los personajes encarnados por McAvoy y Fassbender. En esta ocasión, la línea que separa a ambos de ser héroe y villano es más fina que nunca. Sobre todo en el caso de Xavier, cuyas intenciones, pese a ser buenas en un principio, no serán sino el anticipo del desastre que ocurrirá cuando Jean se vea poseída por la fuerza cósmica de Fénix.
Turner, pese a desempeñar un rol más o menos interesante, no termina de convencer del todo. En teoría tendría que interpretar a un personaje fuerte, a la vez que asustado por la dimensión de sus poderes. Pero desaprovecha la oportunidad, y su rol como Fénix parece más bien un adolescente enfadado y caprichoso, que cuando no salen las cosas como quiere da rienda suelta a su frustración. Pero con la salvedad, de que aquí su rabieta se puede llevar por delante a medio universo.
La película, además del tercio final caótico, adolece de otro gran problema. Y es que no aprovecha, ni saca partido del todo, a la villana interpretada por Chastain. La actriz hace lo que puede con un personaje plano, del que se podría haber sacado mucho más jugo. Casi en ningún momento se le puede considerar una verdadera amenaza, salvo en un determinado momento de la cinta. El resto del tiempo se dedica a hablar y hablar.
El film es irregular, pero por lo menos no resulta aburrido. Y algo que hay que agradecer es que su duración no llega a las dos horas, por lo que cuando uno se quiere dar cuenta, la cinta ha avanzado bastante.
Si os gustan las cintas de mutantes dadle una oportunidad. Pero no esperéis que esté a la altura de Logan o X-Men: Primera clase. Lo que aquí os vais a encontrar es algo en la línea de la anterior entrega. Es una producción que cumple, pero que da muestras de cansancio. Ahora, tan solo hay que esperar que la integración de los alumnos de Xavier y compañía, tengan un mejor recorrido en el universo cinematográfico de Marvel que en sus dos últimas entregas.
A continuación el tráiler:
X-Men:Fénix Oscura se estrena el próximo 7 de Junio.
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