Dirigida como la anterior entrega por Adil El Arbi y Bilall Faliah, y escrita por Chris Bremmer y Will Beal, la trama nos cuenta como Mike Lowrey, Will Smith, y Marcus Burnett, Martin Lawrence, se verán envueltos en una peligrosa aventura cuando intentan investigar la verdad que se oculta tras la acusación de corrupción de su fallecido capitán Howard, Joe Pantoliano, lo que les pondrá en el punto de mira tanto de los cárteles de droga, como de agentes corruptos.
Además de los intérpretes arriba citados, en el reparto también nos encontramos con Rhea Sheehorn, encarnando a la hija del fallecido capitán Howard; Paola Núñez retomando su rol como la capitana Rita Secada; Dennis Greene, que vuelve a encarnar a Reggie el yerno de Marcus o Jacob Scipio como Armando, el hijo de Mike.
He de decir que me sorprendió saber de esta nueva entrega. La anterior me gustó, pero no sabía que iban a tardar tan poco en realizar una nueva cinta. Y, la verdad, es que está muy entretenida. Nuestros chicos malos ya no hacen las locuras que hacían antaño, a pesar de que de vez en cuando hagan alguna de las suyas.
Una vez más, tal y como he dicho hace unos párrafos, uno de los aspectos a destacar es la química entre ambos protagonistas, la cual se mantiene intacta después de 20 años. Si bien Lawrence carga con algunos de los mejores gags de la cinta, Smith también tiene sus golpes de humor y oportunidades para lucirse en la partes más físicas del film.
Si bien la producción tiene buenas escenas de acción, algunas de ellas pueden llegar a ser un poco caóticas, sobre todo la que tiene lugar en los instantes finales del film. Algo que se puede apreciar en el tiroteo final, entre los héroes y los villanos de turno. En algunas ocasiones, puede llegar a marear un poco, debido a los constantes giros de cámara que introducen los realizadores. No digo que esté mal rodado, pero haber dejado quieta la cámara no le hubiera venido mal en absoluto.
Aquí se echa en falta la mano de Bay, realizador que dirigió las dos primeras entregas y que está acostumbrado a ofrecernos set pieces de acción bastante chulas. Baste recordar la persecución de La Roca o las batallas entre Autobots y Decepticons en las dos primeras partes de Transformers, además de habernos ofrecido esa maravilla de film de acción, y una de sus mejores obras, como es 13 horas: Los soldados secretos de Bengasi, donde se dan de la mano buenas interpretaciones, y muy buenas secuencias de acción.
Otro de los aspectos a destacar, es su duración inferior a las dos horas, lo cuál es de agradecer. No le hacen falta tramas secundarias, con las que alargar el metraje de forma innecesaria. Lo que hoy día es algo casi normal en la mayoría de producciones que se estrenan en la gran pantalla.
Casi desde el comienzo del film, los directores ya ponen la directa y apenas sueltan el acelerador, lo que hace que la cinta pase volando. Cuando miré el reloj, ya había pasado casi una hora de metraje. La trama avanza de manera rápida, pero uno se entera de lo que pasa. Es decir, no cuentan las cosas de manera atropellada.
Mientras escribo estas líneas, las cifras de taquilla no podían resultar mejores para esta película, y es que ha doblado su presupuesto, por lo que no sería nada raro no volver a ver a estos chicos malos de vuelta más pronto que tarde. Aquí se puede poner como ejemplo, la frase "los viejos rockeros nunca mueren" ya que ambos actores han resultado ser clave en la recaudación y, quién sabe, si no han podido ser lo que inauguren la época de taquillazos, ahora que viene el período estival.
Smith necesitaba este éxito como agua de mayo, y a recuperar parte del favor del público que perdió a raíz del incidente en los premios de la academia de hace un par de años. Por lo que parece ser, la audiencia ya lo ha perdonado. Y es que, no hay que negar que el que fuera El príncipe de Bel Air, tiene un carisma arrollador y su presencia garantiza, salvo excepciones, un buen fajo de billetes para las arcas del estudio que produzca su nueva propuesta.
Tanto si sois seguidores de la saga, como si os gusta el cine de acción, esta es una peli que no deberíais dejar pasar. Es la ocasión ideal para agarrar un cubo de palomitas, un refresco gigante, como hice yo, y dejarse llevar por dos horas de pura diversión.
A continuación, el tráiler:
Espero que os haya gustado la entrada de hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario