Hay cuestiones que, por mucho que uno se pregunte, no puede encontrar respuestas. Una de ellas es la ausencia de la entrada de hoy en las nominaciones a los Oscar de este año. Un film que está bien dirigido, bien escrito, con buen montaje y bastante bien actuado. En la entrada de hoy, expresaré mi opinión sobre esta cuestión.
Escrita y dirigida por Damien Chazelle, la cinta nos cuenta las vidas de Manuel Torres, Diego Calva, la aspirante a estrella Nellie LaRoy, Margot Robbie, y la estrella del cine mudo Jack Conrad, Brad Pitt, que cruzarán sus caminos en el Hollywood de los años 20 antes de la llegada del cine sonoro, y de como cambiarán sus vidas con la introducción del sonido.
Además de los intérpretes arriba citados, dentro del reparto nos encontramos también con Jovan Adepo, en el rol del trompetista Sydney Palmer, Jean Smart como la periodista de cotilleos Eleinor St John, Olivia Wilde, Ethan Suplee o un sorprendente Tobey Maguire como el mafioso James McKay, quien aprovecha sus escasos minutos en pantalla para dar bastante mal rollo.
Tres horas de puro cine, una carta de amor al séptimo arte. No se me ocurre otra forma de definir la nueva propuesta del realizador de La La Land, y una vez más, el director demuestra ser uno de los realizadores más en forma del panorama cinematográfico actual.
La cinta nos muestra como era el Hollywood de aquella época, con sus excesos y la vida de aquellas estrellas. Las cuales no supieron, o no pudieron adaptarse a los cambios que se avecinaban y que cambiarían la forma de ver las películas.
Lo mejor de la cinta es su trío protagonista. Un Brad Pitt es estado de gracia, interpretando a una estrella que me recordó a Douglas Fairbanks; una Margot Robbie volviendo a demostrar, una vez más, que es algo más que una cara bonita, y un sorprendente Diego Calva, quien aquí aprovecha la oportunidad que se le brinda y sale airoso del enfrentamiento ante estas dos estrellas.
El film de Chazelle pone el dedo en la llaga, al mostrar las miserias de aquellos años. No solo por mostrar lo que pasaba cuando se apagaban los focos, sino también al mostrar la hipocresía de aquellos que estaban en este mundo, el racismo y la forma en la que eran utilizados y desechados los intérpretes que intervenían en aquellos filmes. Tan pronto estaban en la cresta de la ola, como que dejaban de contar con ellos de buenas a primeras si sus cintas no recaudaban lo esperado. Tal y como se puede ver, aquellos tiempos no se diferencian mucho de los actuales.
Pese a su larga duración, superior a las tres horas, el metraje pasa en un suspiro. Y eso es gracias al ritmo que Chazelle le ha sabido imprimir a su nueva propuesta. No solo homenajea al cine clásico, como Cantando bajo la lluvia, que aparece en no pocas ocasiones, sino también realiza guiños a las figuras de Joseph Von Sternberg, Gloria Swanson o Fatty Arbuckle.
El film combina instantes hilarantes, con aquellos que hacen que la sonrisa se te quede congelada en el rostro. Y es que, a medida que avanza la acción, la comedia va dejando paso al drama. Y es que la película se puede ver como el típico film que narra el nacimiento, auge y caída de aquellas personas que se vieron absorbidas por el torbellino de la fama hollywoodiense.
Los instantes finales del film, que por supuesto no voy a desvelar, rinden sincero homenaje al séptimo arte, y a aquellas producciones que, de una forma u otra, marcaron el devenir de la historia del cine. En estos momentos, es casi imposible que a uno no le venga a la cabeza el final de esa obra maestra llamada Cinema Paradiso.
Si os gustan las propuestas de cine dentro de cine, esta es una propuesta que no debéis dejar pasar. Seguro que no os arrepentiréis en absoluto.
A continuación el trailer:
Tal y como ocurrió unas entradas atrás, os dejo con la opinión de Marta sobre la entrada de hoy, adelante:
Algo influenciada por las críticas que había leído en redes sociales, me metí a ver "Babylon" pensando que me iba a encontrar un tostón de más de 3 horas. Cual fue mi sorpresa que no pude separar mi vista la de pantalla; solo para mirar el reloj cuando tras casi 40 minutos de introducción, por fin aparece el título de la película. (¿en serio?, se han pasado volando)
Muchos se quedaron por el camino en aquel Hollywood que, tras el éxito de "El cantor de Jazz", tuvo que dar paso al cine sonoro. ¿Te viene a la cabeza "Cantando bajo la lluvia"? Don Lockwood (Gene Kelly) y Lina Lamont (Jean Hagen) intentando filmar su primera película sonora con no pocos quebraderos de cabeza, con Kathy Selden (Debbie Reynolds) sacándoles las castañas del fuego porque la Lamont (superestrella del cine mudo) tenía una voz horrenda.
El cine dentro del cine. No es que sea en sí un guiño u homenaje, es que "Cantando bajo la lluvia" está presente durante gran parte del film, es parte de la película. No diré mas para no reventar la película.
Mencionar su banda sonora. Una mezcla de jazz y charleston mezclados con ritmos modernos, que funciona muy bien con las imágenes y que te provoca querer saltar de la butaca y meterte en la pantalla para viajar en el tiempo hasta los años 20.
Para terminar, desde Brad Pitt o Margot Robbie, pasando por los figurantes, todas las interpretaciones son de 10. No creo que le sobre ni un minuto de metraje, perfecta tal y como es.
Porque Hollywood es ese lugar que o amas u odias, pero con el que todo el mundo sueña.
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