Muy buenas a todos. Ayer tuve ocasión de asistir al pase de la obra cómica de microteatro por dinero llamada gatillazo y he de confesar que me lo pasé genial. Y no fui el único, los asistentes a la misma no paramos de reír en toda la representación. Una obra muy divertida que trata desde un punto de vista cómico algo que a muchos hombres les ha pasado alguna vez que otra. Pero no adelantemos acontecimientos todavía, un pequeño respiro y en seguida vamos al turrón como se decía en Humor Amarillo.
Obra escrita por la propia protagonista de la obra y con dirección de Jesús Granda la trama es la siguiente: una atractiva jóven de la que desconocemos su nombre, Patricia Córdoba Rojo, esta en una buhardilla donde ha pasado una noche de amor con un guapo hombre del que tampoco sabemos como se llama y que cuenta con los rasgos de Jose Dánez. El chico ha tenido un gatillazo y a través de eso se desarrolla la historia de como ha podido ocurrir.
La historia pese a tu tono abiertamente cómico, también deja lugar para la ironía y en ocasiones la ternura, tal y como se puede apreciar en los instantes finales de la obra, donde la chica sabe tirar de ironía para hacerle ver al chico que es algo más común de lo que se cree.
En la obra hubo un par de instantes en los que a la prota se le escapaba la risa, al tratarse de una comedia me quedó la duda de si era por el golpe de humor que venía a continuación o no. Hablando hoy con la autora de la obra me ha resuelto la duda: era del guión por lo que la chica gana enteros al hacerlo natural algo que te venía por escrito. Ya que como se sabe, no sería la primera vez que a un actor está a punto de escarparsele una risa que no venía en el escrito, y cuándo esto ocurre sus compañeros de reparto ya están prestos a echarle una mano para que todo siga su cauce natural.
No me cansaré de decirlo, son este tipo de obras las que nos hacen ver que en nuestro país tenemos una cantera de actores cojonudos, y que gracias a escuelas como Metropolis son capaces de desarrollar todo su talento. No son solo caras bonitas, hay mucho esfuerzo, noches en velas, ilusión y cariño en toda representación que hacen por lo que los espectadores se lo agradecen de la mejor forma que saben: apoyando sus proyectos y yendo a ver sus representaciones.
En un espacio reducido los actores saben sacar el mayor aprovechamiento posible, ya que el miniescenario cuenta tan solo con cajas de cartón, pocos posters y un colchón inflable. El decorado se quiere asemejar a una buhardilla y el efecto desde luego está más que conseguido.
Otro punto a favor de la obra es la química que tienen ambos actores, se complementan a la perfección y se nota que si ellos se lo han pasado bien ensayándola y posteriormente representándola, los espectadores mucho más.
Si estáis interesados en acudir a ver la obra se representa todos los miércoles y jueves del mes de mayo en la Calle Génova número 7 5 C en la sala de microteatro el apartamento, en el siguiente enlace podréis saber más acerca de la misma: http://teatro.genova7.com/
Espero que os haya gustado la entrada de hoy.
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