pelicula: freddy vs jason

Muy buenas a todos. Hoy os traigo una cinta bastante gamberra y que mezcla a partes iguales el terror en su forma slasher, con unas gotas de comedia bastante negra. Aunque ya tiene unos cuantos años, hay que decir que ha envejecido bastante bien y que no somos pocos los que llevamos esperando tiempo a que se haga la tan anunciada secuela. Mientras tanto, a esperarse tocan. Arranquemos el Delorean y viajemos al pasado. Listos? Allá vamos.

Dirigida en 2003 por Ronny Yu, realizador al que debemos La novia de Chucky o La novia del cabello blanco entre otras, la trama de la cinta es la siguiente: los adolescentes de Springwood ya no tienen pesadillas con Freddy Krueger, rol de Robert Englund, debido a una droga. Enfurecido, decide utilizar a otro psicópata atrapado con él en el inferno y que no es otro que Jason Voorhees, encarnado por Ken Kirtzinger. Utilizando de marioneta al asesino de Crystal Lake hará que mate a adolescentes para hacer creer que él sigue vivo. La lucha entre ambos psicópatas ha comenzado cuando el segundo escape del control del primero.
Una verdadera pasada, así es como puede calificarse esta peli. Olvidaos de actuaciones dignas de Oscar; de un guión elaborado y con personajes ricos en detalles; o de una dirección solo al alcance de los grandes maestros. Si es lo que buscáis os habéis equivocado de cinta. Aquí la casquería, las frases tópicas; los personajes arquetípicos de las pelis de terror se dan de la mano para ofrecer a los espectadores un festival de sangre, casquería y humor negro gracias a la unión de dos de los mayores y más carismáticos psicópatas de la saga slasher del cine.
Pude ver esta cinta en el momento de su estreno en cine, y he decir que no me decepcionó en absoluto. Solo buscaba poco más de una hora y media de casquería, diversión y con efectos clásicos de maquillaje, y desde luego es lo que me encontré. Como he dicho en el párrafo anterior, el ver enfrentarse a hostia limpia a dos iconos del terror moderno es una pasada, aunque la moda no es nueva. Recordemos que la Universal ya lo hizo en los años 30, tanto en tono serio como de comedia con la cinta Abbot y Costello contra los fantasmas.
Poco tiempo después de esta cinta, se editó en formato de comic una secuela no oficial pero la mar de interesante en la que ambos psicópatas hacían frente a Ash, el carismático protagonista de la saga Posesión infernal, quién sin comerlo ni beberlo se ve envuelto en la lucha entre ambos asesinos y en el que el Necronomicón, el famoso libro de la saga de Raimi, hará de las suyas de nuevo.
Divertida? Por supuesto. Buena? Yo no diría eso, es más bien regulera y dista mucho de ser una obra maestra. Pero es consciente de ello, e incluso saca partido de ello. Es una peli para pasar el rato y poco más, pero si sois fans de estos dos iconos la vais a disfrutar cosa mala.
Como viene siendo norma general, os dejo con el trailer de la reseña de hoy:

Espero que os haya gustado la entrada de hoy.