libro: grotesque

Muy buenas a todos. Inauguramos nuevo mes, y para no perder la costumbre lo hacemos reseñando un libro que acabé ayer de leer, y cuya presentación fue el pasado viernes. No es la primera vez que el autor de la la novela que hoy se comenta, puesto que todas sus obras hasta las fecha han sido analizadas. En esta ocasión nos sorprende con unos relatos que no dejan indiferente una vez se ha acabado su lectura. Pero no adelantemos acontecimientos todavía, acompañadme en un viaje que tiene una semana de duración, donde sus protagonistas vivirán unas peripecias cuanto menos extrañas y sobre todo grotescas. Listos? Allá vamos.

Escrito por Ignacio Cid Hermoso, con ilustraciones de Javi Hernández y publicado por Dissident Tales, el presente volumen consta de siete relatos, como días tiene la semana, en el que los protagonistas se verán envueltos en situaciones donde el horror, y los sucesos extraños se dan de la mano para acompañarles, y de paso a los lectores, a un viaje sin retorno a las entrañas de la locura.

El primer relato, ambientado en Lunes lleva por título Pierdes tu lugar, en el, un hombre se despierta sin ojos, y a nadie parece importarle. Será un comienzo de un viaje a la sinrazón y a la locura, donde todo lo que le acontece parece ser ignorado por todas las personas que le rodean. Una crítica a la sociedad actual, donde todo el mundo mira por si mismo, sin apenas hacer caso a los demás.

El segundo relato transcurre en Martes, y se titula Otorgas vida. En donde unos padres primerizos tienen a su hijo pero no sale como ellos imaginaban, ya que la mujer da a luz a un árbol, pero no parece importarles ya que lo quieren igual que si fuera de carne y hueso. Cosa que no son de la misma opinión todos aquellos que hay a su alrededor. Historia dura, sencilla y con un final muy amargo y que hace que se te forme un nudo en la garganta.

El tercero tiene lugar en Miércoles y se llama Buscas la felicidad. Aquí una pareja se traslada a un piso donde una caja fuerte espera ser abierta, pero tal vez en algunas ocasiones algunos misterios deben permanecer ocultos y cerrados.  Uno de los relatos con la temática más extraña junto con el que cierra la presente antología, y del que hablaré más tarde. Uno piensa que va de una cosa, para que en su tercio final el autor te deje noqueado con el cambio argumental que introduce, y que por supuesto no voy a desvelar para no arruinar la sorpresa.

El cuarto tiene su acción en Jueves y lleva por título Coges un vuelo, en el que los pasajeros de un avión se verán envueltos en situaciones donde las situaciones extrañas parecen tomar el control de la situación casi desde el momento mismo en el que toman asiento en su lugar correspondiente. El relato de mayor extensión de los que conforman la presente antología, uno de los que más me han gustado debido a la mezcla de de géneros y donde las pinceladas de humor negro, negrísimo, aparecen cada dos por tres. Por cierto, bonito homenaje el que el autor rinde a uno de los escritores patrios del género de terror al nombrarle protagonista de la aventura.

Llegando a la recta final de la semana, nos encontramos con el relato correspondiente al Viernes titulado Te vuelves loco de amor, en donde un hombre de mediana edad vivirá un romance con un objeto bastante mortal, lo que sin duda cambiará su vida. Terror y humor muy negro se dan la mano en uno de los relatos más ligeros, si es que se puede calificar así, de los que conforman el presente volumen.

En Sábado tenemos Tratas de subir a casa, donde un joven llega a su casa de madrugada e intentando llegar a su piso, vivirá situaciones que navegan entre lo onírico y lo irreal. Un relato que sin duda haría las delicias de David Lynch, tanto por la atmósfera que ser respira a lo largo de sus páginas, como por los personajes que van apareciendo en sus páginas. Extraño pero a la vez disfrutable.

La traca final llega en Domingo con Encuentro mi camino, el relato que más me ha costado comprender del libro. Aquí una niña con cabeza de puño se rebela contra todo lo que le rodea. Raro en el buen sentido de la palabra, cuesta comprender lo que acontece, al menos en opinión de quién esto suscribe y con final nada convencional, algo que es la tónica de esta novela.

Aviso que este libro no es para todos los gustos. Todos aquellos que hayáis seguido en mayor o menor medida la trayectoría de Ignacio os vais a sorprender con el cambio con el que nos sorprende. Sigue manteniendo intacto el estilo que tanto nos gusta, así como su talento a la hora de escribir situaciones y personajes, pero nos descoloca del todo en según que situaciones, y no son pocas a lo largo de sus poco más de 130 páginas de extensión. Es breve pero cunde, y mucho.

Es un libro extraño y que supone una patada para la mente, pero también toda una experiencia la que nos aguardan en sus relatos, en el que el horror y las situaciones más raras y extrañas que os podáis imaginar se dan de la mano en un viaje, que una vez lo acabéis no os dejará indiferentes, eso tenerlo seguro. Tal vez esta sea la obra más personal del autor, y eso se nota.

Capítulo aparte merecen las ilustraciones, sencillas y bellas y que sirven de complemento perfecto a los relatos. Situadas antes de los mismos, suponen la antesala perfecta a lo que nos vamos a encontrar instantes después. Por lo que supone un buen aperitivo a modo de introducción.

Si os gustan los libros extraños y que se salen de lo normal, y buscáis sorprenderos, este sin duda es vuestra novela. Por contra, si lo que os mola son las cosas sencillas, este libro supondrá para vosotros un directo que os dejará KO.

Espero que os haya gustado la reseña de hoy.