serie: crying freeman

Muy buenas a todos. Si hace un par de entradas comentaba la cinta de imagen real Crying Freeman, hoy toca hacer lo mismo pero con su adaptación a la pequeña pantalla en forma de dibujos animados, y que expande más lo que se vio en la película, puesto que la misma tan solo adaptaba el primer episodio basado en el famoso manga. Pero no adelantemos acontecimientos todavía, acompañadme en un viaje para conocer más sobre este famoso asesino. Listos? Allá vamos.

Dibujada por el estudio Toei Animation y con una duración de seis capítulos, que se extendió desde 1988 hasta 1994 la serie nos narra las peripecias de Freeman, el mejor asesino del mundo y de la que es su pareja y anterior objetivo Emu y de las aventuras que viven en el universo criminal en el que se mueven. A lo largo de sus peripecias conocerán tanto a amigos como enemigos, jugando cada uno de ellos un papel clave ya sea para ayudarles, o todo lo contrario.

Serie muy bien dibujada y con unas tramas interesantes y que adaptan los 9 volúmenes de los que consta el original, que no he leído pero me están entrando ganas de hacerlo y más después de haber visto ambas adaptaciones. El manga contó con los lápices de Ryoichi Ikegami y con guiones de Kazou Koite. Supongo que la fuente original tendrá los mismos niveles de sangre, violencia y sexo como los que tienen los dibujos animados.

El show no se corta un pelo a la hora de mostrar escenas de sexo explícito, desnudos y violencia por doquier. Pensaba que sería algo más light, y eso que la cinta de imagen real también tenía su chicha. Pero craso error, da un paso más y muestra cosas que sería complicado ver hoy día, viviendo los tiempos políticamente correctos en los que estamos. Afortunadamente la serie fue hecha a caballo entre los 80 y los 90, una época dorada a la hora de mostrar desnudos y violencia en la gran pantalla, e incluso también en los anime japoneses, baste recordar como ejemplos la saga Urotsukidoji; Ninja Scroll o El puño de la estrella del norte, por citar algunos casos.

La serie nos descubre más sobre Freeman y de como va evolucionando con el paso de los capítulos, pero no solo él. Emu también crece muchísimo, y va ganando en riqueza y matices a medida que van avanzando los episodios. Así, en sus 6 OVA somos testigos de como nuestro protagonista ha de enfrentarse a clanes mafiosos rusos o italianos, un pariente que quiere arrancarle el liderato de los 108 dragones o de una organización criminal cuya líder tiene una enfermiza obsesión con el asesino llorón.

Los capítulos tienen una duración de 50 minutos aproximadamente, por lo que cunden bastante y da tiempo a enterarse de todo. El final de la serie, que por supuesto no voy a desvelar, deja todo cerrado y bien atado, prueba de ello es que no se han hecho más episodios o editado más volúmenes del manga hasta donde yo sé, si alguien lo puede confirmar se lo agradecería.

Si tenéis primos o sobrinos pequeños no le pongáis la serie, pese a que sea de dibujos su público objetivo son los adultos, por los datos que he mencionado unos párrafos atrás. Los fondos de los paisajes que aparecen molan, las escenas de violencia que las hay y mucho, no desentonarían en absoluto en un film de imagen real, pese a alguna fantasmada que otra que vemos y aún así se perdona, debido al carisma que destila el personaje.

Si os gustan los animes con acción, violencia, sexo y donde los personajes están bien definidos y construidos, no lo dudéis y echarle un vistazo. Seguro que no os decepciona.

A continuación el trailer:

Espero que os haya gustado la entrada de hoy.