Dirigida por Paul Verhoeven en 1998 el argumento nos narra las aventuras de diversos cadetes espaciales, con los rasgos entre otros de Casper Van Dien; Denise Richards; Dina Meyer; Jake Busey y Neil Patrick Harris, que han de enfrentarse a la amenaza de unos extraterrestres con forma de bichos que amenazan con liquidar a toda la raza humana. La aventura está a punto de comenzar.
Adoro esta cinta, es una de esas pequeñas joyas que merecen reivindicarse. Parte de la culpa, por no decir toda recae sobre los hombros de Verhoeven, un experto a la hora de ofrecer a los espectadores dosis de violencia y acción sin cortarse un pelo. Baste recordar los ejemplos de Desafío Total o Robocop, por citar dos de sus ejemplos más destacados dentro del cine de acción o ciencia ficción en su carrera estadounidense.
La película es la adaptación de la novela homónima de Robert Heinlen, que hace una burla de las sociedades fascistas. Prueba de ello es que los uniformes de algunos de soldados recuerdan de manera bastante sospechosa al vestuario que lucían en el tercer Reich. Todos aquellos que sirven al ejercito son poco menos que héroes y son considerados como tal, desempeñando puestos importantes en el gobierno una vez han acabado su servicio.
Los efectos de maquillaje y el diseño de las criaturas son una verdadera pasada, en el caso del segundo ejemplo corrió a cargo de Phil Tippett, ganador de dos premios de la Academia por los efectos especiales diseñados para Parque Jurásico y El Retorno del Jedi, por lo que no es ningún novato y sabe lo que se hace.
Otra de las cosas a destacar son la aparición de dos secundarios que cuentan con muchas de las simpatías por los aficionados al fantástico y al cine en general. Me refiero a Michael Ironside, recordado sobre todo por sus roles de villano en cintas como Scanners o la ya citada Desafío Total, y Clancy Brown, el Kurgan de Los Inmortales o uno de los sádicos guardias de Cadena Perpetua. Saben en que tipo de producción están y se lo pasan en grande, y los espectadores igual. Destilan carisma y chulería y saben meterse a la audiencia en el bolsillo desde que aparecen.
Tres de los protagonistas
Varios son los momentos a recordar, bien por sus dosis de humor negro o por la acción. Si tuviera que rescatar uno en particular sería la batalla que libran nuestros protagonistas en un planeta, en el que se ven rodeados en un fuerte por la mayor parte del ejercito enemigo, entre los que se encuentran lo que vendría a ser sus soldados de infantería y apoyo aéreo encarnado por monstruos voladores. La planificación y la forma de estar rodado recuerda a la parte final de Zulú o El Álamo, el film dirigido por John Wayne, en el que unos soldados hicieron frente al ejercito mexicano siendo superados ampliamente en número.
Han pasado 18 años desde su estreno, y apenas ha envejecido. Y es que cuando las cosas se hacen bien, no importa el tiempo que pase puesto que la gente la seguirá recordando con aprecio. Si ya los actores, salvo los casos ya mencionados en el párrafo anterior a los que habría que añadir a Neil Patrick Harris, lo hubieran hecho bien ya estaríamos hablando de un peliculón en toda regla. Pero para el que esto suscribe lo es.
La cinta conoció un par de secuelas que fueron directas a DVD, las cuales no he visto ya que no me llamaban en absoluto la atención, para un servidor solo existe este film. Si alguno de los seguidores del blog la ha visto, y quiere dar su opinión será más que bienvenido.
Si os gusta el cine de ciencia ficción con grandes dosis de acción, humor negro, una banda sonora impresionante a cargo del gran Basil Poledouris, que compuso la partitura de Robocop, unos efectos especiales molones y tenéis ganas de pasarlo bien, no lo dudéis y echarle un vistazo. Si ya la habéis visto, siempre es un buen momento para darle un nuevo visionado.
A continuación el tráiler:
Espero que os haya gustado la entrada de hoy.
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