Muy buenas a todos. Hoy de nuevo vuelvo a comentar una cinta protagonizada por Christopher Lambert. Y ya advierto que no será la última vez, cierto es que no es un buen actor y que la mayoría de sus películas dejan mucho que desear. Pero es un tío al que tengo especial simpatía, no me preguntéis el porque o la razón, es algo que no puedo explicar. En esta ocasión, se embarca en una buddy movie que cumple todos los clichés, habidos y por haber del género. Pero no adelantemos acontecimientos todavía, acompañadme en un viaje donde dos hombres y una banda de criminales andan tras la pista de un más que cuantioso botin. ¿ Listos ? Allá vamos.
Dirigida por Deran Sarafian, realizador entre otros filmes de Libertad para morir o Velocidad terminal, en 1994 la trama es la siguiente: Dani, papel de Christopher Lambert, es un contrabandista liberado de prisión por Cole, rol de Mario Van Peebles. Uno conoce el paradero de un botin de 400 millones de dolares y el otro el nombre del barco donde se encuentra. Ambos tendrán que unir fuerzas antes que los sicarios liderados por Armor, interpretado por Denis O´Leary, de Peter Loomis, con los rasgos de Patrick Stewart, un barón de la droga llegue antes que ellos. La aventura comienza.
Típica/tópica película de acción, con un argumento muy simple y que hemos visto una y mil veces. La de dos hombres sin nada en común que han de unir sus fuerzas para salir airosos de la situación en la que se han metido. No hay nada nuevo bajo el sol, pero de nuevo es como lo cuentas lo que hace que una peli mole o sea un aburrimiento mortal. Menos mal que la cinta que hoy reseño entra dentro del primer grupo, eso si por los pelos.
Que nadie se lleve a engaños, la cinta es pasable, entretenidilla sin más. Uno tiene que ser consciente de lo que va a ver, una serie B en toda regla. Con medios apañados tanto a nivel de dirección como interpretativo, sacan un film justito. Ninguno de los actores se va a llevar un Oscar, ni pretenden hacerlo, tan solo quieren hacer pasar un buen rato a los espectadores, algo que en opinión de quién esto suscribe consiguen.
Hay actores que cuando echan la vista atrás se arrepienten de algunas producciones en las que han intervenido, es el caso de Patrick Stewart. El reputado intérprete inglés, ahora reconocido por haber sido el profesor Xavier en X-men o el capitán Picard en Star Trek, hizo este papel supongo que por la pasta, ya que apenas da muestras del gran talento que tiene. Ya que sino no se entiende que este en esta película, pero hay que poner los garbanzos sobre la mesa.
Esta no sería la primera ocasión en la que tanto Peebles como Lambert coincidían, puesto que poco tiempo después lo volverían a hacer en Los inmortales 3. Ambos intérpretes demuestran tener buena química, aquí disfrutan chinchándose el uno al otro para acabar viendo que en el fondo forman un buen equipo. En cuanto al villano interpretado por Leary, se lo pasa en grande, y eso es algo que se nota.
Uno de los puntos a favor es la duración. Poco más de 90 minutos, por lo que va directa al grano y no se anda por las ramas. Algo que se agradece, es lo que tienen que durar este tipo de producciones. Así no se hacen pesadas y no aburren, cosa que es mortal de necesidad en las películas de acción.
En resumen, una cinta apañada, simpática y que no tiene otra pretensión que la de entretener. Si no la habéis visto dadle una oportunidad, y si ya lo habéis hecho siempre es un buen momento para darle otro visionado y ver que tal ha aguantado el paso del tiempo.
Espero que os haya gustado la entrada de hoy.
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