pelicula: aventuras en la gran ciudad

Muy buenas a todos. Hoy toca una de esas cintas recordadas por aquellos que o están cerca de la treintena o la han sobrepasado como ocurre en el caso de un servidor. La película en cuestión supuso en su momento una plataforma de lanzamiento al éxito para dos de sus máximos responsables como veremos más adelante. Pero no adelantemos acontecimientos todavía, llega el momento de arrancar nuestra maquina del tiempo partículas para viajar al pasado. Listos? Allá vamos.

Dirigida en 1987 por Chris Columbus, famoso realizador al que debemos títulos como Solo en Casa o las dos primeras entregas de Harry Potter, y protagonizada por Elizabeth Shue la trama es la siguiente: Chris, rol de Shue, es una joven que después de que su pareja cancele su cita decide irse a cuidar a unos niños. Pero cuando recibe una llamada de su amiga Brenda que se encuentra perdida en la ciudad, sale a ayudarle en compañía de los chavales a los que se les ha unido el vecino de ambos. Poco imagina tan variopinto grupo la aventura que están a punto de vivir.
Una verdadera gozada, no se me ocurre otra forma de describir esta cinta. Todavía conservo la copia en Beta y la guardo como oro en paño. Me acuerdo cuando vi por primera vez esta peli: fue en un fin de semana y desde el momento en que lo hice me encantó. Su argumento, sin ser nada del otro mundo, si que conseguía mantenernos lo suficientemente intrigados durante todo su metraje, haciendo que este pase como un suspiro en sus poco más de cien minutos.
No fuimos pocos los que nos enamoramos de la canguro protagonista de la cinta, pero esto es la vida real y las canguros no son como las pintan en esta peli.
Lo digo y lo mantengo, cine familiar y de aventuras como el que se hizo en los ochenta no se va a volver a repetir nunca, pese a que de vez en cuando algunas producciones intenten recuperar la magia de este tipo de cintas no lo acaban de conseguir del todo. Ahora esta peli pasaría más o menos inadvertida, a no ser que la protagonice la consabida estrella juvenil del momento para alegría de sus fans. Pero cuando fue hecha era consciente que estaba destinada claramente a un publico juvenil, por ello apenas hay violencia y el humor que hay es blanco y políticamente correcto, cosa que no ocurría con el cine de acción de esa época.
Varias son las escenas que uno recuerda de esta producción, destacando por encima de todas tres: la primera es aquella en la que nuestros protagonistas para escapar de la mafia se meten en un club donde cantan una canción para escapar de los villanos; la otra es cuando se encuentran con un mecánico que guarda un parecido más que razonable con Thor y que se se cruzará en su camino un par de veces más y por supuesto aquella en la que el grupo estará en un rascacielos transparente donde se encuentran cenando los padres de los niños y han de pasar por delante de ellos sin que se enteren y que es la que formó parte del poster de promoción tal y como se puede ver unas líneas más adelante.
En los años ochenta Shue hizo unas cuantas producciones destinadas al mercado juvenil y familiar, por eso cuando fue nominada por su rol en Leaving las Vegas dio muestras que era algo más que una cara bonita y que sabía actuar la mar de bien si la daban los papeles correctos.
Si no habéis visto esta peli ya estáis tardando, los que si nunca viene mal revisionarla y ver como la ha tratado el paso del tiempo. En opinión de quien esto suscribe bastante bien.
Como es norma os dejo con el trailer de la reseña de hoy:

Espero que os haya gustado la entrada de hoy.