Muy buenas a todos. Hoy os traigo una cinta de acción poco conocida de hace siete años, lo que es una verdadera pena puesto que sus responsables, unos años después nos trajeron una de las mejores películas del género como es The Raid. Aquí todos ellos demuestran su buen hacer, tanto detrás como delante de las cámaras para traernos un film de acción a la antigua usanza y donde el trabajo de los especialistas hay de destacarse. Viajemos a Yakarta para conocer más sobre esta película. ¿Listos? Allá vamos.
Escrita y dirigida por Gareth Evans en 2009, la cinta nos cuenta la historia de Yuda, Iko Uwais, un joven campesino practicante de Silat, ha de dejar su pueblo y trasladarse a Yakarta donde ha de seguir la tradición de los Merentau, para labrarse un futuro en la capital. Al poco de llegar su encuentro fortuito con Adit, Yusuf Aulia, un ladronzuelo y su hermana Astri, Sisca Jessica, a la que salva de ser golpeada por el chulo Johni, Alex Abbad, le llevará a proteger a ambos hermanos y evitar que la chica caiga en la red de proxenetas para la que trabaja Johni y que está liderada por el sádico Ratger, Mads Koodal, y su mano derecha Luc, Laurent Buson.
Como se puede ver por el argumento no hay nada nuevo bajo el sol. Esta historia no es la primera vez que se ve en pantalla, pero es de nuevo la forma en que lo cuentas la que hace que pueda resultar más o menos interesante para los espectadores. Evans sabe que su historia no es novedosa, por lo que pone toda la carne en el asador en las abundantes escenas de acción que hay a lo largo de la película.
Estas set pieces son una maravilla, sobre todo gracias a la labor de los actores y del equipo de especialistas encargado de coreografiar las escenas de lucha. Estas son violentas y rehúyen de la utilización de cables o ayudas, lo que vemos es el resultado de horas de trabajo y de tenerlo todo cronometrado al minuto para que nada falle a la hora de golpear.
Los que somos aficionados al cine de acción y artes marciales, no podemos si no frotarnos las manos y alegrarnos cuando producciones como esta caen en nuestras manos. Es puro entretenimiento y nos quedamos con la boca abierta viendo las diversas luchas que van apareciendo. Bien sea en un espacio reducido como un ascensor, que tiene lugar poco antes de la batalla final, en un puente o en un muelle de carga por citar algunos ejemplos el protagonista demuestra su buen hacer en Silat.
Es una pena que cintas como esta no lleguen a estrenarse en nuestras pantallas. Son una muestra que con un presupuesto reducido se pueden hacer verdaderas maravillas dentro de la acción. Y en cambio tonterías como la enésima entrega de Superhero movie y similares tengan muchas copias es algo que no logro entender.
Evans ha demostrado con las dos partes de The Raid, más una tercera en camino, y Merentau que es uno de los realizadores del momento en el cine de acción. Es director a la antigua usanza de este género, que no usa efectos digitales y toda la acción es cien por cien real, física y violenta. Uno casi puede sentir las hostias que se llevan todos los que participan en las peleas.
Aquí uno tiene que dejarse llevar por lo que está viendo, sin cuestionarse sin las actuaciones de los actores son más o menos correctas, sí el guión tiene más o menos agujeros o si podría haber más humor. Esta es de esas ocasiones en las que hay que desconectar el cerebro y disfrutar de lo que está viendo, es cine de artes marciales género que no destaca precisamente por la calidad de sus actuaciones o libretos.
Os la recomiendo sobre todo si disfrutasteis con las entregas de The Raid y no habéis visto esta, es pura evasión que no concede un momento de respiro y no da tiempo a que te aburras. Si la visteis ya, siempre es buen momento para volver a hacerlo y matar el gusanillo hasta que nos llegue el nuevo trabajo de su director.
Espero que os haya gustado la entrada de hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario