Muy buenas a todos. Hoy aparece por última vez un autor que ha ido apareciendo por este blog de un tiempo a esta parte, esto es debido a que en vida solo publicó 7 obras, que son las que han ido apareciendo de forma más o menos regular. Tal y como ocurrió con Stark, el libro del que voy a hablaros hoy fue publicado de forma póstuma, y en vez de ser novela son un conjunto de relatos de ambiente carcelario, algunos de ellos ambientados en el corredor de la muerte. Pero no adelantemos acontecimientos todavía, acompañadme en un viaje donde los presos son los protagonistas principales de las historias. ¿ Listos ? Allá vamos.
Escrito por Edward Bunker, el presente volumen se compone de 6 relatos cuya extensión varía de más largos a otros menos extensos, pero todos ellos con el nexo en común de estar ambientados en mayor o menor medida dentro del corredor de la muerte. A continuación, pasaré a hacer un breve resumen de cada uno de ellos, pero antes de ello comentar que el libro se abre con una introducción del autor a su editor contándole la idea que tiene sobre escribir unos relatos en vez de una novela y de algunos golpes que Bunker dio en la vida real. Ahora si, paso a comentar cada una de las historias:
- La justicia de Los Ángeles 1927: Bunker nos narra la historia de Booker Johnson, un joven de color quien por un delito menor es condenado a prisión. Aquí, una vez más el autor retoma dos de los temas esenciales que han marcado parte de su obra, uno es el tema del racismo imperante tanto fuera de los muros de prisión como dentro. El otro es como la cárcel puede cambiar a la mayoría de personas que entran en ella, como si fuera un calcetín les da la vuelta y hace sacar todo lo malo que hay en ellos, en un mundo donde para sobrevivir hace falta ser más duro que la mayoría. Muy buen relato, y una buena forma de abrir fuego para lo que nos vamos a encontrar en páginas posteriores.
- Entra en la casa de Drácula: volvemos a encontrarnos con Troy Cameron, el que fuera protagonista de Perro come perro y de su entrada en el corredor de la muerte de San Quintin, después de los sucesos acaecidos en su aventura. La historia toma el nombre de la famosa casa del rey de los vampiros, y que absorbe la vida a todo aquel que entra en ella. Relato breve, pero no por ello menos duro.
- Mía es la venganza: tras la muerte de un compañero negro de prisión, Eddie Johnson de la misma raza jura matar a un guardia como venganza, lo que acaba consiguiendo y que tiene terribles consecuencias tanto para él, como para sus compañeros. Una vez más, el tema del racismo vuelve a hacer aparición en la obra de Bunker, el relato se encuentra ambientado en la década de los 60 cuando los movimientos sociales estaban cobrando gran importancia, sobre todo en San Francisco, los cuales reclamaban una mayor justicia y entendimiento para los presos. Su parte final, que por supuesto no voy a desvelar, es bastante cruda y trajo como consecuencia el cambio en los juzgados norteamericanos tal y como lo conocemos hoy día.
- Muerte de un soplón: dos presos han conseguido infiltrarse en el ala donde está un soplón con la misión de matarlo, pero no todo sale como tenían pensado en un principio. De nuevo con pocas páginas, Bunker consigue meternos de lleno en una historia donde la acción está muy presente.
- Huida del corredor de la muerte: el relato que da nombre a la presente antología, es el que más me ha gustado. Aquí los lectores son testigos de como unos presos de diversa calaña planean la huida del corredor de la muerte de San Quintin, y como Roger, el protagonista del relato, intentará que sus compañeros de fuga mantengan la calma mientras intentar escaparse causando las menos bajas posibles entre los trabajadores de la prisión.
- La vida por delante: un joven afronta su entrada en prisión de la manera más natural posible, orgulloso de ello, sabiendo que con ello saldrá más duro que cuando entró. Bunker en esta historia muestra como a algunos delincuentes lo que le atrae de esta vida es la adrenalina que ello les provoca y no conocen otra forma de provocarla, como si fueran adictos al riesgo a pesar de las consecuencias que les pueden traer.
En este libro, el autor vuelve a hacer gala de su maestría a la hora de narrar las diversas historias que formaron parte de su obra , el lenguaje, las situaciones vividas por los personajes no le son ajenas en absoluto, puesto que paso gran parte de su vida entre rejas. Es por ello que son tan adictivos de leer, es alguien que ha pasado los sucesos que nos narra, por lo que nadie mejor que un preso para narrarnos como viven, piensan y actúan los criminales.
Sin duda alguna, Bunker fue uno de los mejores autores de la literatura negra estadounidense reciente y con razón está considerado un autor de culto en países como Francia o Inglaterra. Por lo que a mi respecta, he disfrutado con cada una de sus obras y cada vez que puedo lo recomiendo.
Espero que os haya gustado la entrada de hoy.
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