Dirigida por Jon Burton en 2013 y con guión de David A. Goodman, la cinta nos cuenta como Bruce Wayne gana en una fiesta el premio al hombre del año frente a su rival Lex Luthor. Este celoso se alía con el Joker, para que la némesis de Batman cree un gas que hará que la gente le ame y sea declarado presidente de los Estados Unidos. Y de paso construir kryptonita con la que librarse de una vez por todas de Superman. Para impedir que ambos villanos se salgan con la suya, los dos superhéroes contarán con la ayuda de Robin y de la liga de la justicia.
Muy divertida cinta con una animación bastante decente y que se basa en el videojuego Lego Batman 2: DC super héroes, de la que se han aprovechado las secuencias cinemáticas y a la que se ha añadido metraje para dar coherencia a la historia.
Lo mejor es el humor y tono paródico que hay a lo largo de la cinta y que resulta apto para todos los públicos. No hay que olvidar que es una película destinada al público infantil, por lo que las palabras malsonantes brillan por su ausencia.
Pese a su carácter infantil hay unas cuantas secuencias de acción chulas repartidas a lo largo del film, como por ejemplo la batalla en la fiesta antes mencionada interrumpida por el Joker y los enemigos clásicos del hombre murciélago: el Pingüino, Enigma, Catwoman y Dos Caras; la que tiene lugar en el manicomio de Arkham tras la fuga del Joker orquestada por Luthor y en donde a los villanos arriba mencionados se les une Bane o la batalla final de la liga de la justicia al completo contra Joker y Luthor.
Si por algo se caracteriza la división animada de DC, además de su cuidada animación, es por el reparto de voces en versión original. Aquí destacan Clancy Brown, el Kurgan de Los inmortales, que vuelve a doblar a Lex Luthor; Troy Baker con una amplía trayectoria en el mundo de los videojuegos pone sus cuerdas vocales a Batman; Christopher Corey Smith que al igual que Baker proviene de los videojuegos y se encarga de dar voz al Joker y por último Charlie Schlatter, proveniente de la televisión, presta su voz a Robin.
Una cinta que sirve para pasar el rato y poco más. Tiene una duración de 70 minutos por lo que pasa en un suspiro. Y de paso es una buena forma de que los niños más pequeños de la cosa conozcan a Batman y descubrir el lado más amable y divertido, además del Batman de Adam West y Burt Ward, del caballero oscuro.
En resumidas cuentas:
Lo mejor: el tono ligero y aventurero de la película.
Lo peor: nada destacable.
La secuencia: la batalla final en las calles de Gotham.
La imagen: Batman con sus alas extendidas con la luna al fondo.
El momento: la llegada de la liga de la justicia.
A continuación el trailer:
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