Dirigida en 1989 por Andrei Konchalovsky, de quien ya comentamos El tren del infierno, nos contaba la siguiente historia: Ray Tango, Stallone, y Gabriel Cash, Russell, son dos de los mejores detectives de Los Angeles. En apariciencia distintos, el primero pulcro y serio, el otro vestido de manera muy informal y siempre de broma, son muy eficaces en su trabajo. Tanto, que uno de los mayores traficantes de droga del país, Yves Perret, les tiende una trampa que acaba con ambos policias en la carcel. Escapar de la misma y limpiar sus nombres se convertirá en su principal obsesión.
Como villano tenemos a Jack Palance, y como su secuaz al inolvidable Brion James y al que todos recordamos por su participación en Blade Runner. James era un actor que salvo excepciones siempre encarnó al villano de turno y además lo hacía bien el jodío, haciendose odiar por los espectadores que solo esperaban que el héroes de turno acabase con él. Y como chica a la ahora de moda Teri Hatcher. Como apunte curioso señalar que el fallecido Eddie Bunker, el señor azúl de Reservoir Dogs, hace un breve papel como jefe de Cash.
Por mucho que la gente diga, no es un film malo en absoluto. Cierto que no pretende cambiar el género en el que está inscrito, ni lo intenta. Pero cumple de sobras con su función, que no es otra de hacer pasar a los espectadores un buen rato mientras la están visionando. Todavía me acuerdo de verla en video, y desde ese momento se ha convertido en una de mis favoritas.
En la cinta, el personaje que consigue caer bien al espectador desde el momento que aparece es el personaje de Russell. Cierto que aquí Sly se permite hacer bromas, pero es Cash el que tiene los mejores golpes de humor y sus momentos de lucimiento fisico en las peleas que hay a lo largo del film. Algunas secuencias que tengo grabadas en la memoria cinefila son las que tienen lugar en la carcel o en enfrentamiento final en la guarida del villano, que es tomado a conciencia por nuestros policias.
Desde que comienza la película y el personaje de Stallone hace un chiste con uno de sus personajes más memorables, Rambo para ser más exactos, el espectador sabe lo que se va a encontrar. Chistes y acción, como he mencionado unas líneas más atrás, están perfectamente equilibrados en esta pequeña joya que merece reivindicarse, si es que no lo ha hecho ya.
Otra de las cosas por las cuales es recordada Tango y Cash, es por su pegadiza banda sonora. Fue compuesta por Harold Faltermeyer, a quién debemos la famosa canción de Superdetective en Hollywood y Top Gun. Ochentera a tope, con uso de sintetizadores en la mayor parte de su partitura, no estará entre las grandes del cine. Pero si merece la pena escucharse y añorar viejos tiempos.
Como viene siendo habítual os dejo con el trailer de la cinta analizada hoy:
Espero haberos hecho recordar viejos tiempos.
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