sábado, 31 de agosto de 2024

película: El cuervo (2024)

En esta vida hay que arriesgarse, tomar decisiones que pueden cambiar nuestra forma de pensar o, incluso, nuestra vida. Pero, en otras, es mejor ser cauto, estarse tranquilo y hacer caso de las señales que te indican que, por ese camino, no vas bien. Es lo que me ocurrió en la entrada de hoy, en la que pese a oír opiniones que desaconsejaban su visionado, las ignoré y vi el film en cuestión. Así pues, veamos que se esconde detrás de este remake.


Dirigida, es un decir, por Rupert Sanders y escrita por Zach Baylin y William Schneider seún el cómic de James O'Barr la trama nos cuenta como Eric Draven, Bill Skarsgard, y su novia Shelly Webster, FKA Twigs, son asesinados por los secuaces de Vincent Roeg, Danny Huston, Eric volverá de entre los muertos para vengarse de aquellos que mataron al amor de su vida.

Tal y como se puede ver por el argumento, la cinta es más o menos fiel a lo visto en el film original dirigido por Alex Proyas, cuya reseña podéis leer aquí. Pero tan solo se parece en el nombre de los amantes muertos, el resto toma un camino del todo distinto. Lo que en un principio podía haber sido interesante, ya que tenía elementos necesarios para hacerlo, pero se queda en un quiero y no puedo que acaba perjudicando el producto final.

El Eric de Skarsgard es alguien con traumas y problemas con las drogas, mientras que la Shelly de Twigs se ve perseguida por un trauma de su pasado. Es decir, nada que ver con los personajes que conocimos en la original Esto podía haber sido interesante, ya que son dos almas destrozadas y que se aman tras haberse conocido en un centro de desintoxicación. Pero, se queda en agua de borrajas. Lo mismo se puede aplicar al villano, de lo poco reseñable del film. Mientras que en la original Eric va dando caza a cada uno de ellos, e incluso interactuando, aquí llega, los ve y los mata sin más.

Mientras la veía, me preguntaba por que razón el director no había tomado otra dirección distinta a la que ha acabado ofreciendo. Tenía un villano con bastante potencial, que podía haber sido más amenazante de lo que al final es; también unas escenas de acción interesantes que tardan en llegar, pero que cuando aparecen ha merecido la pena la espera y un protagonista con un buen talento actoral y que podía haber hecho olvidar a Brandon Lee, pero que le falta el carisma necesario para ser un héroe de acción.

El mayor pecado de la película es que es aburrida. Cuando veo una producción de acción, lo mínimo que le pido es que me entretenga. Algo que aquí no sucede, cuando por fin Eric se decide a ejecutar su venganza, ya estamos casi al final del film. Es de los pocos instantes en los que la propuesta de Sanders parece remontar el vuelo, pero es un espejismo. Llegados a estas alturas, lo único que los espectadores desean, entre los que me incluyo, es que la tortura llegue a su fin. Si la acción hubiera entrado antes, otro gallo le hubiera cantado. Baste recordar que en la original, casi desde el principio vemos a Eric dar caza a sus asesinos.

La cinta también esconde una, nada disimulada crítica, a las diferencias entre las clases sociales y lo que la gente está dispuesta a hacer con tal de subir en la escala social. Algo que se nos muestra a mitad de la cinta, y que, más o menos, se puede intuir a medida que va avanzando la trama. 

Si hubiera que destacar algo, además del villano, son las partes que transcurren en ese limbo donde Eric conocerá a Kronos, Sami Bouajila, quien le explica sus nuevas habilidades. Algo que en la original no existe, por lo que aquí hay que dar la enhorabuena a los guionistas, puesto que serán un par de ocasiones en las que Eric visita este lugar. 

El clímax en la opera es de lo poco interesante, un desfile de tiros, desmembramientos y violencia con un protagonista mucho más violento que el original. Pero ya está, estos diez minutos o así que dura este momento, no bastan para hacer que mi opinión sobre este despropósito cambie en absoluto.

No recomiendo verla, no por mala, que lo es, sino también por ser aburrida, con malas interpretaciones y con un protagonista sin carisma alguno. Si vosotros queréis verla, que sea bajo vuestra cuenta y riesgo, yo, desde luego, no lo haría.

A continuación el tráiler:

Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

miércoles, 28 de agosto de 2024

serie: X-Men 97

Con el reciente estreno de Deadpool y Lobezno, cuya reseña podéis leer aquí los mutantes han vuelto a la gran pantalla, pero, meses antes de su estreno en cines lo hicieron en televisión con una serie que resultó ser una verdadera sorpresa, sobre todos por sus tramas con un tono bastante adulto, tanto por la temática como por según que escenas. A la espera que se estrene su segunda temporada, voy a dar mis impresiones sobre la primera tanda de episodios. 

Creada por Beau DeMayo para Disney+, la serie arranca donde lo hizo su predecesora. Sin un líder ahora, los mutantes intentan que los humanos los acepten, lo que no será un camino fácil. En su camino por ser aceptados, serán liderados por su antiguo enemigo Magneto que se ha convertido ahora en el director de la escuela de Xavier. Ahora, nuestros héroes tendrán que hacer frente tanto a nuevas como antiguas amenazas, quienes pondrán a prueba sus habilidades a la vez que buscan su lugar en una sociedad dividida que los temen y aceptan.

Pese a que esta primera temporada consta de tan solo 10 episodios, éstos cunden bastante. A lo largo de esta primera tanda, veremos un arco que se va desarrollando a medida que avanza la serie hasta llegar a un final que nos deja con no pocos frentes abiertos, los cuales por supuesto no voy a desvelar para que os sorprendáis, tal y como hemos hecho todos aquellos que la hemos visto.

Si bien ya había oído buenas críticas por parte de no pocos internautas, me esperé hasta que varios episodios estuvieran ya disponibles para hacerme una maratón. Menos mal que lo hice, puesto que hasta que los 6 primeros, creo recordar, no estuvieron disponibles, no me lancé a verla. Son capítulos cuya duración oscila entre los 30 y los 45 minutos, es decir, una duración estándar para una serie, por lo que te puedes ver varios seguidos. El problema es que, una vez que llegue al último disponible, tenía que esperar hasta que el siguiente estuviera disponible, lo que era una faena. Ya que, sobre todo en los últimos episodios, te dejaba con un final que te dejaba mordiéndote las uñas hasta la semana siguiente y te hacía preguntarte que iba a ocurrir.

Lo mejor de la serie es, sin lugar a dudas, su trama. En el párrafo que inauguraba esta reseña, he destacado su tono adulto, lo que hace que no sea una serie que le puedas poner a tus sobrinos o hijos de corta edad. La edad apropiada para poder verla, al menos para el que esto suscribe, es a partir de los 13 años. No solo por alguna escena violenta, sino también por que el argumento principal, a partir del capítulo 5, que no se aleja mucho de lo que está ocurriendo en la vida real con un conflicto bélico que lleva décadas ocurriendo.

Otro de los aspectos a destacar es el tratamiento de los personajes, en donde sobresale Magneto. El tratamiento que han hecho del personaje es bastante interesante, y cuenta para sí algunos de los mejores momentos. No es que el resto de personajes lo hagan mal, pero es el amo del magnetismo el que se lleva el gato al agua.

Las escenas de acción, que no son pocas, también están bastante chulas. Pero los máximos responsables decidieron, con bastante acierto, dejar estas de lado y centrarse más en los personajes y en los conflictos que surgen entre ellos, y aquellos humanos que los rodean. En no pocos instantes, hay una fuerte carga dramática y el humor, salvo alguna que otra excepción, brilla por su ausencia.

La animación me ha parecido bastante correcta y mantiene el estilo de la serie original pero con ligeros retoques. Así pues a aquellos que no les gustase el estilo de su predecesora, puede que esta secuela les eche para atrás. Pero que no lo haga, dejadla de lado y centraos en lo que de verdad importa, que es la historia.

En los últimos episodios, diversos héroes irán apareciendo en forma de cameos. Son un guiño simpático, a la vez que quieren decir: "Bienvenidos a casa chicos". Como amante de los comics, mi niño interior no pudo evitar aplaudir y emocionarse al ver como los mutantes interactúan con personajes que ya han aparecido en el UCM. Ojalá dentro de poco, les podamos ver hacer los mismo pero en pantalla grande uniendo fuerzas para medirle el lomo al villano de turno.

El episodio que pone un punto y seguido a la serie, os va a tener mordiéndoos las uñas hasta que salga la nueva temporada, que se encuentra en desarrollo. Hasta que se lance, no seremos pocos, entre los que me incluyo, los que estaremos pendientes de cualquier actualización que se vaya lanzando. Habrá que ver por donde van, sobre todo desde que su creador Beau DeMayo fuera despedido debido a que, según rumores, fuera complicado trabajar con él. Por lo menos, dejó escrita la segunda temporada. Así que veamos como siguen las peripecias de los mutantes.

Tanto si sois seguidores de la serie original, como si os gustan los superhéroes o si simplemente queréis ver un show con un tono más adulto, no lo dudéis y dadle una oportunidad. Seguro que no os arrepentiréis en absoluto.

A continuación, la intro:


Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

lunes, 26 de agosto de 2024

documental: Sesión salvaje

Realmente no sé como comenzar esta reseña. Me resulta complicado encontrar las palabras adecuadas con las que dar inicio a la entrada de hoy sin que el fanático del tipo de cine que se comenta en el documental salga a la luz y bah, que demonios, que salga. Este film es una auténtica gozada, que se disfruta de principio a fin, y nos hace recordar los tiempos de videoclub y cines de barrio que eran tan abundantes en la década de los 80 y que ahora, por desgracia, ya no existen. Esta cinta es pues, un canto de amor tanto a esa época, como a sus mayores exponentes cinematográficos.

Dirigido por Paco Limón y Julio César Sánchez, que se encargan del guion junto a Daniel Luis López, el documental supone un viaje por el cine español de explotación, en el que había cabida para el western, el terror, la comedia o el drama, por citar parte de los géneros con los que los cineastas desde finales de los sesenta, hasta casi los noventa, hicieron las delicias de una generación de espectadores que crecieron viendo sus propuestas.

Mediante testimonios de actores y cineastas como Alex de la Iglesia, Nacho Vigalondo, Antonio Mayans, Lone Fleming, Emilio Linder, Fernando Esteso, Mariano Ozores, Fernando Guillen Cuervo, Miguel Ángel Vivas, Álvaro de Luna o Jess Franco, por citar algunos ejemplos, los espectadores serán testigos del cambio de forma de hacer cine que había en nuestro país, primero mediante coproducciones para luego lanzarse a realizar sus propias cintas.

Este film supone una auténtica gozada para, los que esto suscribe, nos criamos con la época de los videoclubs, algo que también mencionan algunos de los entrevistados. Uno no puede estar más de acuerdo, el ir a ese lugar un fin de semana y maravillarse con las portadas, el juntarte con los amigos y esperar a que le película que querías ver estuviera libre o que la trajesen y mientras tanto ir hablando con el dependiente, era una experiencia. 

Es más, tal y como dice en un momento uno de los entrevistados, uno se podía llevar a casa una película guiado por su portada esperándose una cosa para luego llegar y ver que era todo lo contrario. El ejemplo más claro es el de Terminator 2, explotación italiana dirigida por Bruno Mattei que copiaba de forma descarada el poster de James Cameron, y que fue lanzada un par de años antes de la secuela oficial del T-800. Al contar esta anécdota, uno no puede evitar soltar una sonrisa ya que no fuimos pocos los que caímos al ver la carátula.

Una de las partes que más me gustaron, es cuando citan al cine de terror que tenía en Paul Naschy, cuyo documental ya fue reseñado y podéis leer aquí a uno de sus máximos representantes, a quien más tarde se unirán Jorge Grau con No profanar el sueño de los muertos, Amando de Osorio y La noche del terror ciego o Eugenio Martín con Pánico en el transiberiano, además de los ya clásicos de Narciso Ibañez Serrador La residencia y  Quién puede matar a un niño. Estos cineastas demostraron su amor por el género, sobre todo en el caso de Naschy, 

A lo largo de sus poco más de 80 minutos de metraje, que saben a poco, irán desfilando delante de nosotros no pocos clips de películas, mal llamadas de explotación e incluso algunas de ellas, como las protagonizadas por Paco Martínez Soria, como españoladas. Así, entre estos pequeños cortes veremos Los Bingueros, Quién puede matar a un niño, La residencia, Mil gritos tiene la noche por citar los casos más reconocidos.

Como no podía ser de otra forma, al hablar del fin de la censura era evidente que el cine de destape y el cine de kinkis iban a ser citados ya que suponían una forma de liberación para un pueblo que había sufrido casi 40 años de dictadura para por fin, poder mostrar, todo aquello que antes solo se podía intuir. Famoso es el caso del desnudo frontal de María José Cantudo en La trastienda.

Precisamente el cine de destape cuenta con su parte en el documental. Mediante declaraciones de actrices que intervinieron en este género, argumentan que los guiones estaban plagados de desnudos por que sí, y que así te venía en el guion. Pero no todas las intérpretes pasaron por el aro y se negaron a intervenir en según que filmes con desnudos, a no ser que los mismos estuvieran justificados, ya sea por la trama o por hacer reír a los espectadores, según declaran Esteso y el director Mariano Ozores.

Pero, tal y como se afirma en un momento del documental, todo lo que sube tiene que bajar. Y ya, a mediados de los ochenta, este tipo de cine ya no atraía a las salas al público como solía hacer antes. Puede ser que, parte de la culpa la tuviera también la conocida Ley Miró, que quería eliminar este tipo de producciones de cine fantástico, terror o acción para centrarse en un cine "más serio", con lo que fue una estocada para estos filmes que hicieron pasar buenos momentos a los espectadores.

Si bien conocía buena parte de las cintas que aquí se comentan, otras no lo eran en absoluto y una vez visto el documental, te dan ganas de investigar y verlas, puesto que tienen una pinta cuanto menos interesante. Es por eso que adoro este tipo de filmes, o en su defecto ensayos que hablan de cine, que nos permite descubrir cine y ampliar nuestros conocimientos sobre el mismo.

Tanto si os gustan los documentales sobre cine, como si queréis recordar los tiempos de videoclub y del cine que se hacía hace cuarenta años en nuestro país, y que no era lo que se solía hacer, dadle una oportunidad. Seguro que no os arrepentiréis en absoluto.

A continuación, el tráiler:


Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

domingo, 25 de agosto de 2024

película: Llamada a un reportero

Dentro del cine que se hizo en la década de los ochenta, hay cintas que han pasado a la historia del cine. Enumerarlas sería harto complicado, puesto que cada uno tiene las suyas. Pero, dentro de esta década existen cintas que pasan desapercibidas como ocurre en la entrada de hoy. Un filme que, pese a tener no pocos elementos a su favor, no suele aparecer a la hora de nombrar a las mejores películas rodadas en este período de tiempo. Pero para eso esta el blog, para reivindicarla. Así pues, vamos a arrancar el Delorean y viajar al pasado.

Dirigida por Philip Borson, escrita por Christopher Crowe que adapta la novela escrita por John Katzenbach, autor de El psicoanalista, el argumento nos cuenta como el reportero Malcolm Anderson, Kurt Russell, quiere dejar su puesto en Miami para trasladarse junto a su novia Christine, Mariel Hemingway, a Colorado. Pero, cuando una serie de asesinatos comienzan a suceder y el asesino, Richard Jordan, decide en ponerse en contacto con el periodista y hacerle su confidente, la vida de Malcolm cambiará.

Además de los intérpretes arriba arriba citados, en el reparto también nos encontramos con Joe Pantoliano, dando vida a Andy fotógrafo del periódico donde trabaja Malcolm; Andy García interpretando a Ray Martínez contacto en la policía del periodista o Richard Masur encarnado a Bill Dolan, jefe del reportero.

Tal y como se puede ver por el argumento, la cinta es interesante. Nos mantiene en tensión en buena parte de su metraje, y las interpretaciones están bastante contenidas, resaltando las llevadas a cabo por Russell y Jordan, héroe y antagonista. Aquí Russell está alejado de los papeles de acción a los que nos tiene acostumbrados, e interpreta a un hombre más de la calle, sin rastro alguno de tipo duro.

Uno de los factores que hacen recomiende este film, es su duración. Con poco más de una hora y media de metraje, el argumento no se anda por las ramas y, casi desde su comienzo, va al grano. No mete tramas secundarias innecesarias, algo que es típico en las tramas de las cintas realizadas en los ochenta. Ya que, con 80, 90 o como mucho 100 minutos bastan para contar una historia, algo que, por desgracia, apenas vemos en las producciones que hoy llegan a nuestras pantallas.


Otro de los elementos que hay que destacar, es que pese a ser una serie de un asesino en serie, apenas se ve sangre o violencia a lo largo del film, salvo en los instantes finales. El director, sabe jugar la carta de mantener la tensión, sobre todo en las conversaciones mantenidas entre el reportero y el psicópata. A medida que va avanzando en su investigación, Malcolm se va obsesionando más y más con dar caza a este asesino.

En el film apenas hay momentos de acción, pero, cuando los mismos hacen acto de aparición están justificados. Así, rescato el momento en el que Malcolm inicia una carrera para evitar el secuestro de Christine, por lo que no dudará en saltar por un puente levadizo e impedir que el villano consiga su objetivo.

Si tuviera que poner una pega, sería al personaje de Hemingway. No la veo creíble como actriz, y su interpretación es de lo más flojo del film. Además, su química con Russell es inexistente. Te dicen que son pareja, pero no te lo crees. Si la hubiera interpretado otra actriz, tal vez otro gallo hubiera cantado, pero su rol parece estar interpretado sin gana alguna.

Una pequeña joya a reivindicar y que suele pasar desapercibida. Si os gustan los filmes con una duración ajustada, con un argumento simple pero efectivo y que os hagan pasar un buen rato, no lo dudéis y dadle una oportunidad. Seguro que nos arrepentiréis.

A continuación el tráiler en versión original:


Espero que os haya gustado la entrada de hoy.


sábado, 24 de agosto de 2024

cómic: Sidney Hammer

Hace poco fue mi cumpleaños, y uno de los regalos que recibí fue la entrada de hoy. No sabía de su existencia, menudo descubrimiento. Me ha gustado mucho, puesto que tiene buena parte de los elementos que más me gustan ya sea en literatura o cine; elementos pulp; terror; frases míticas; un protagonista con carisma, en este caso una mujer que no tiene nada que envidiar a Buffy en lo que a enfrentarse a monstruos se refiere y, sobre todo, diversión a raudales. Así pues, veamos que aventuras le deparan a Sidney.

Creado, escrito y dibujado por Massacre, el alias utilizado por Alejando Miguel de Hoyos, el presente volumen nos narra las peripecias de Sidney Hammer, una intrépida periodista que trabaja para el diario sensacionalista The Sunset y que siempre está acompañada por su perro Bush. A lo largo de sus aventuras, Sidney hará frente a zombis, asesinos psicópatas, hombres lobo, sectas satánicas y adoradores de un dios lovecraftiano.

Esto es, a grandes rasgos, el resumen de las peripecias de nuestra protagonista. No se sabe en que época transcurren, pero, por lo que uno puede intuir estarían ubicadas en los años 50/60 o al menos es lo que he intuido. Puesto que son varias las pistas que el autor nos va dejando a lo largo de las páginas: un clon de Elvis; OVNIS; pruebas sobre playas abandonadas; diarios amarillistas que buscan más el morbo que preocuparse de noticias reales o, el detalle más simpático del tomo, la venta de juguetes por catálogo en donde se incluyen: pistolas laser; gafas para detectar zombis o un bebe alienígena en un frasco. Además que el autor incluye el cupón correspondiente para poder pedirlo.

El tebeo es, como he mencionado hace unos párrafos, un divertimento de primer orden. Ya desde la primera página, vemos a nuestra protagonista cargándose zombis sin inmutarse, tan solo armada con su martillo. Pero le basta y le sobra para despachar a la amenaza, sin despeinarse un solo pelo de la cabeza y soltando frases lapidarias mientras lo hace. Sidney es un personaje que, en la línea de los detectives privados, es alguien que, sin pretenderlo, se ve envuelta en líos sin pretenderlo. Es como si los problemas le buscarán, aunque ella no lo quiera. 

El dibujo está bastante chulo, y me recuerda a los que servían de acompañamiento a las historias de Creepshow. Ignoro si la intención del autor era rendir homenaje a estos tebeos o no, pero, si ese era su propósito, desde luego que lo ha conseguido. Las viñetas son bastante dinámicas, con buena profundidad y un uso del color en las dos primeras historias bastante bueno, algo que no ocurre en la tercera, que es en blanco y negro y que también le sienta de lujo a nuestra protagonista.

Un detalle que me gustó, fue que, a lo largo de sus peripecias, Sidney va alternando flashbacks, ya sea de casos anteriores o de como acabó envuelta en la aventura que nos está contando. Pero también nos comenta detalles de otros eventos que le ocurrieron anteriormente, nos deja con la miel en los labios, ya que uno quiere saber más acerca de Sidney. Esto es dejar con la miel en los labios a los lectores, dejarnos con ganas de más.

Tal y como podéis ver por la portada, el estilo imita a esos tebeos pulp. El tono desgastado de la tapa, el color, una protagonista atractiva con la que llamar la atención a los lectores masculinos o diversos carteles que nos incitan a comprar el comic y disfrutar de las peripecias de Sidney.

Otro de los aspectos a destacar, es que cada una de las aventuras incluidas terminan en un final abierto, en el que se nos prometen nuevas aventuras de esta intrépida reportera. Y además, siempre nos encontramos la conclusión una vez que Sidney ha terminado con la misión principal, cuando se encuentra cansada y sus habilidades no están al máximo.

Ignoro si el autor y la editorial habrán sacado más comics con  Sidney de nuestra protagonista, pero, si así fuera, quiero leer más. Y, en caso de no haber publicado más, desde aquí les animo a hacerlo.

Si os gusta el pulp, el terror, los protagonistas duros y con carisma o, si simplemente, os queréis dejar llevar y disfrutar de un entretenimiento de primera, no lo dudéis y dadle una oportunidad. Seguro que nos arrepentiréis en absoluto.


miércoles, 21 de agosto de 2024

serie: Banshee

 A la hora de hablar de las mejores series de televisión, los primeros ejemplos que a uno se le vienen a la cabeza son Los Soprano, Breaking Bad, The Wire o 24, por citar algunos casos. Pero, como suele ocurrir, también hay otros shows que suelen pasar desapercibidos y que merecen la pena reivindicarse. Es lo que ocurre con la entrada de hoy, un entretenimiento de primera que bebe del mejor cine negro, así como de la acción, formando un buena mezcla que satisfará a todos aquellos que se acerquen a verla.

Creada por Jonathan Tropper, la serie nos cuenta como tras pasar 15 años por el robo de unos diamantes un exconvicto, Antony Starr, va en busca de su expareja Anastasia, Ivana Milicêvic,  que ahora vive en Banshee para recuperar su parte. Pero al poco de llegar, se ve involucrado en una pelea en la que muere Lucas Hood, el que iba a ser el sheriff de la ciudad y decide asumir su identidad. Desde ese momento, su vida dará un vuelco.

De hecho, en ningún momento se llega a saber el verdadero nombre de nuestro protagonista. Es un hombre sin nombre, en la línea del personaje que encarnó Clint Eastwood en la trilogía del dólar de Sergio Leone.

Además de los intérpretes arriba citados, en su reparto también nos encontramos con Ulrich Thomsen, que interpreta a Kai Proctor el mafioso de la ciudad; Frankie Faison, dando vida a Sugar Bates un exconvicto que tiene un bar y se convertirá en aliado de nuestro protagonista; Hoon Lee, como Job pirata informático; Matt Servitto como Brock Lotus ayudante del sheriff; Matthew Raunch en el rol de Clay Burton guardaespaldas de Proctor o Lili Simmons interpretando a Rebecca Bowman sobrina de Proctor.

La serie se podría resumir en tres T: Tías buenas/tetas; Tiroteos y Testosterona. Desde su comienzo, seremos testigos de no pocos tiroteos, frases cortantes, desnudos femeninos y masculinos y una actitud chulesca por parte de Starr, anticipándose unos cuantos años al rol de El Patriota en The boys y que le ha dado a conocer en todo el mundo. Pero la gran diferencia con el famoso villano de la serie de Amazon, es que aquí es un cabronazo pero que le importa la gente. En no pocas ocasiones pondrá su vida en peligro para hacer lo correcto, a pesar que sea un criminal.

Y es que esto es, precisamente, el gran atractivo de la serie. El ver como un criminal usa sus habilidades para impartir la justicia a su manera. Es un personaje con bastantes grises, y del que vamos conociendo detalles a medida que avanzan los episodios, sobre todo en la cuarta temporada. Según va pasando la serie, seremos testigos de que su pose de tío duro es solo una fachada, ya que bajo la misma, se esconde un ser humano que se ha llevado no pocos palos, tanto literales como figurados, a lo largo de su vida.

Pero si el héroe mola, los diferentes antagonistas que van apareciendo a lo largo de la serie no le van a la zaga. Desde un estupendo Ulrich dando vida a un villano con grandes dosis de carisma, pasando por Raunch como el silencioso pero letal guardaespaldas o Geno Segers como Chayton Littlestone, un peligroso piel roja. Todos ellos cruzarán sus caminos en más de una ocasión con nuestro protagonista y sus ayudantes.

He de decir que he tardado en ver esta serie, y no por vagancia que conste, pero es que hay mucho que ver, hasta que, en este verano al fin me he decidido a verla. Todo un acierto, no sé porque he postergado tanto su visionado, puesto que es una verdadera gozada. Da lo que promete, y el hecho de que sean tan solo 4 temporadas, con 38 capítulos en total, hace que se pueda ver en poco más de una semana. Los capítulos son adictivos, y en más de una ocasión nos encontraremos una escena postcréditos.

Me resulta complicado escoger a mi personaje favorito además de Starr, puesto que cada uno de ellos tiene su propio momento de lucimiento, ya sea en la parte de acción, como por como está escrito el rol que interpreta. Uno de ellos sería, sin duda, Job. No solo demuestra ser un gran hacker, sino también ser bastante letal en el combate cuerpo a cuerpo y en el uso de armas de fuego. Es un robaescenas nato, lo mismo se puede decir de Milicêvic, algo más que una cara bonita y que demuestra ser bastante dura de pelar.

Si bien las tres primeras temporadas son bastante buenas, sobre todo en el caso de la tercera, no se puede decir lo mismo de la temporada final. No es que sea mala, que no lo es, es solo que no llega a alcanzar la intensidad y dramatismo de la que hacían gala las tres anteriores. Aquí la amenaza a la que se tienen que enfrentar los protagonistas, si bien es peligrosa, no alcanza los niveles de peligrosidad de otros antagonistas. 

A lo largo de la serie veremos como Hood reparte hostias, pero también las recibe, quedando en no pocas ocasiones bastante magullado. Es un tío duro, pero no invencible, tal y como se puede ver cuando se enfrenta por primera vez con Chayton, más grande y fuerte que él. Si lo vence, es por casualidad, y eso después de haber recibido más que un tambor en la tamborrada de Calanda.

Si hubiera que ponerle una pega, por decir alguna, es que en algunos episodios se nota el digital. Nada grave, puesto que buena parte de lo que vemos en pantalla es trabajo de especialistas y efectos clásicos, pero cuando estos efectos digitales hacen aparición, se notan un pelín, lo que no debe de quitar mérito alguno al cómputo global.

Tanto si os gusta la acción, como una serie que tiene un tono bastante seco, no lo dudéis y dadle una oportunidad, seguro que no os arrepentiréis en absoluto.

A continuación la intro de la serie:


Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

lunes, 19 de agosto de 2024

película: Alien Romulus

El pasado jueves se estrenó, por fin, la nueva cinta basada en el universo de Alien. Si bien los primeros avances prometían una vez vista he de decir que, las expectativas, se cumplen de sobra. Esto es lo que los aficionados al xenomorfo llevábamos esperando hace tiempo, un espectáculo de terror, acción y suspense y que supone no solo un canto de amor a la saga, sino también una más que digna visión de esta serie.


Dirigida por Fede Álvarez, que se encarga del guion junto a Rodo Sayagues, la trama nos cuenta como en el año 2142 Rain, Cailee Spaney, una joven huérfana que vive junto a su hermano adoptivo Andy, David Jonsson, acepta la oferta de su antigua pareja Tyler, Archie Renaux, para hacerse con unas cámaras criogénicas en una estación espacial con las que poder viajar al planeta Yvaga, donde empezar una nueva vida. Lo que ignoran los jóvenes, es que están a punto de vivir una pesadilla al descubrir una extraña forma de vida.
Además de los intérpretes arriba mencionados, en su reparto también nos encontramos con Kay, Isabela Merced, la hermana de Tyler; Bjorn, Spike Fearn, amigo de Tyler y Navarro, Aileen Wu, pareja de Bjorn y piloto de la nave que les lleva a la estación espacial.

Menudo año lleva Cailee, no solo ha estado en Civil War uno de los mejores filmes estrenados este año, sino que también la tenemos en una de las cintas más esperadas del año. Lo que nos indica que estamos ante una actriz con un gran futuro por delante, capaz de saltar de superproducciones a otras películas con un presupuesto menor dando muestras de su talento, tanto en unas como otras.

Vaya con Fede Álvarez. El director uruguayo ha demostrado tener una buena mano a la hora de asustar a las audiencias de todo el mundo. Ya sea en el remake de Posesión infernal o en la entretenida No respires, el realizador ha demostrado tener bastante talento en cuanto a crear atmósferas terroríficas se refiere. No solo eso, sino que ha demostrado tener su sello personal, algo patente en cada una de las producciones que estrena. Además, su querencia a la hora de recurrir a efectos clásicos de maquillaje hace que se le tenga más aprecio, puesto que es un cineasta a la antigua usanza.

A lo largo de la cinta, Álvarez no solo va dejando multitud de guiños a toda la saga, uno de ellos os va a emocionar, además que juega un papel esencial en el devenir de los acontecimientos, sino que también ha sabido crear instantes que os mantendrán en tensión. Mis dos momentos favoritos son dos: el primero de ellos tiene lugar en los instantes finales, y, sin duda alguna, el mejor de todos tiene que ver cuando nuestros protagonistas, han de atravesar una habitación llena de facehuggers sin que los detecten.

Tal y como he mencionado en el párrafo anterior, el film supone un festival de sangre, gore y acción. Varios son los instantes en los que la hemoglobina hace acto de presencia, de forma bastante bestia además. Pero además también nos vamos a encontrar con mucha tensión, puesto que nuestros protagonistas no solo han de luchar con las criaturas, sino también con la propia estación que no tardará en estrellarse, por lo que su carrera contra el reloj es doble.


Uno puede apreciar que el realizador es un amante de la serie Alien. Sobre todo de las dos primeras entregas, a las que rinde un nada disimulado homenaje a lo largo del metraje. Puesto que Alien: Romulus se puede definir como una mezcla entre ambas producciones, es más, el film está ubicado cronológicamente entre la película de Scott y la de Cameron. Así Álvarez juega con el terror y la acción, sobre todo la segunda está presente en la segunda mitad del film. Es más, en no pocos instantes el personaje de Rain recuerda Ripley, una mujer que tendrá que poner a prueba sus habilidades a la hora de sobrevivir contra el xenoformo.

Otro detalle que hay que agradecer, es que los personajes se comportan de forma lógica, tal y como ha de ser. Álvarez hace que sus personajes no vayan por los lugares comunes del terror, y sus acciones son bastante lógicas, pero siempre ha de haber un personaje que lo eche todo a perder y que desencadena todos los acontecimientos. De forma lógica, ya que, de otra forma, no habría película.

Apenas hay que ponerle alguna pega a la cinta. No es perfecta, ni mucho menos. Uno sabe lo que se va a encontrar cuando entra a ver este tipo de filmes. Si hubiera que poner algún pero, es que hay varios finales, hasta que llega el definitivo. Cuando uno cree que ha terminado, Álvarez decide que aún no nos lo ha mostrado todo y nos quiere mostrar algo más de la lucha de Rain contra el monstruo.

Hay que agradecer que su duración sea de dos horas, lo ideal en este tipo de producciones. Ya desde que comienza, va directa al grano. Su reparto lo hace bastante bien y el hecho de que la acción, transcurra prácticamente en un par de localizaciones, hace que la atmósfera sea bastante claustrofóbica, puesto que nuestros protagonistas tendrán que hacer frente a la amenaza sin apenas armas, por lo que su lucha es bastante desigual, sobre todo teniendo en cuenta que el lugar está plagado de xenomorfos.

En resumidas cuentas, tanto si sois seguidores del terror, como de la saga de Alien este es un film que no debéis dejar pasar y que os dejará un buen sabor de boca.

A continuación el tráiler:


Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

miércoles, 14 de agosto de 2024

libro: The Blues Brothers. Granujas a todo ritmo

Cuando en 1980 se estrenó Granujas a todo ritmo, sus máximos responsables quisieron rendir un homenaje tanto al blues, como a los máximos representantes de este género musical. Pero, hasta que ese proyecto se hizo realidad, pasaron no pocas peripecias que se narran en este ameno ensayo que, sin duda, hará las delicias tanto de los seguidores del film de Landis, como de aquellos a los que les gustan las historias detrás de las cámaras.


Escrito por Daniel de Visé, y prólogo a cargo de Toni García Ramón, el presente ensayo consta de 29 capítulos, en donde se nos va desgranando no solo el proceso de filmación, y problemas, que tuvo la cinta, sino también como se gestó todo, el nacimiento de la amistad entre sus dos principales protagonistas, así como la creación de Saturday night live,  a partir de ahora usaré la abreviatura SNL, de donde salieron estos dos irreverentes hermanos.

Sorpresa más que agradable la que me he llevado con este libro. Poco sospechaba lo que me iba a encontrar una vez inicié su lectura. Ya que, si bien la portada te da indicio de por donde puede ir, nada más lejos de la realidad. Puesto que, tal y como podréis comprobar todos aquellos que os animéis a leerlo, se esconden bastantes sorpresas.

Uno de los aspectos que menos me gustó, por así decirlo, es que buena parte del libro está dedicado a la figura de James Belushi, fallecido en 1983 por una sobredosis. Algo normal, si uno lo analiza de forma fría, ya que, en caso de seguir vivo, probablemente el ensayo hubiera estado repartido de forma más equitativa entre ambos protagonistas. Lo que no quita para que su autor, también nos hable de Aykroyd, pero no de forma tan extensa como hace con el que fuera protagonista de Desmadre a la americana.

Pero este es, como he dicho, un detalle menor. El resto de la obra nos mantiene enganchados a la misma desde que comenzamos a leer. Ya desde el prólogo, en el que García Ramón expresa su amor por este film, uno ya sabe que el resto del tomo va a disfrutar, puesto que, en no pocas ocasiones, se nos escapará alguna risa que otra. Pero también alguna lágrima, sobre todo al conocer la vida privada de Belushi, alguien con un talento bestial para la comedia pero que, por su afición a las drogas, nos dejó de forma prematura.

Resulta bastante curioso, como el autor va sembrando semillas y pistas, hasta la unión de Aykroyd y Belushi en SNL. Ambos dieron sus primeros pasos por separado en compañías de teatro cómicas, en las que ya daban pistas de su facilidad para hacer reír a las personas, ya sea haciendo de samurái en el caso de Belushi, o como alocado vendedor en el de Aykroyd.

Lo que en un principio parecía un breve sketch para SNL, pronto se convirtió en algo más serio cuando ambos cómicos decidieron llevar su amor por el blues un paso más allá. Para ello, decidieron rodearse de grandes músicos expertos en este género musical, y que, a la postre, acabarían formando parte de la banda en Granujas a todo ritmo para, posteriormente, lanzarse a escuchar horas de clásicos para poder escoger sus temas favoritos.

Canciones que terminaron formando parte de la banda sonora, y que, en su mayoría, fueron cantadas por las principales voces del blues. Así, artistas como Aretha Franklin, James Brown, Cab Calloway o Ray Charles, decidieron embarcarse en este proyecto, lo que supuso que nuevas generaciones les descubriesen y que les llevasen a llenar estadios y a posicionarse en las listas de los discos más vendidos. Todo por obra y gracia de Belushi y Aykroyd.

Pero la producción, tal y como he comentado unos párrafos atrás, no estuvo exenta de problemas, parte de ellos debido al comportamiento poco profesional por parte de Belushi, parte por el presupuesto que se disparó de forma alarmante debido a continuos retrasos en el calendario de rodaje. Pero, todos estos inconvenientes, no hacen sino hacer más grande a esta cinta que ya tiene, y con todo merecimiento, el estatus de culto.

En el ensayo, nos vamos a encontrar no solo con fotografías de archivo del rodaje del film, sino también con instantáneas personales de ambos protagonistas, ya sea en su etapa teatral, como en sus apariciones en SNL.

Desde luego, es una pena lo de Belushi. A medida que iba avanzando en su lectura e iba conociendo algo más sobre la figura del cómico sentía una mezcla de tristeza y cabreo. Tristeza por como se iba destruyendo por su afición a las drogas y, en menor medida, al alcohol. Cabreo porque si bien lo intentó dejar en no pocas ocasiones, al final fue incapaz de dejarlo y nos dejó sin haber interpretado junto a Aykroyd Los Cazafantasmas. Su rol lo acabó interpretando Bill Murray, surgido de la cantera de SNL, pero Aykroyd lo acabó homenajeando en la figura de Moquete.

Tanto si os gusta la película, como si os apasionan los cotilleos detrás de las cámaras del mundo del cine, este ensayo es ideal para vosotros. Una lectura muy recomendable para poder pasar este verano en las horas de máximo calor.

Como homenaje al libro, he aquí uno de los temas más reconocidos y famosos del film dirigido por Landis:



Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

lunes, 12 de agosto de 2024

película: La trampa

Según reza el famoso dicho "Si me engañas una vez, es culpa tuya. Si me engañas dos, es mía". Pues bien, esta frase de Anaxágoras se puede aplicar a Shyamalan. El cineasta hindú ya lleva tiempo engañándonos con sus nuevas propuestas, y eso que ya deberíamos ir con la mosca detrás de la oreja pero, el puñetero, sabe como vendernos sus películas. Algo que aquí ha vuelto a suceder.


Escrita y dirigida por M. Night Shyamalan, la trama nos cuenta como Cooper, Josh Harnett, un asesino en serie conocido como El Carnicero acude junto a su hija Riley, Ariel Donoghue, al concierto de la cantante de moda Lady Raven, Saleka Shyamalan. Pero, al poco de llegar nota la presencia de muchos policías, por lo que pregunta a un empleado de la venta de merchandising a que se debe tanto despliege. El vendedor le confiesa que todo es una trampa para detener al psicópata, y que todo el evento no es más que una trampa para poder apresarlo.

Además de los intérpretes arriba citados, en el reparto también nos encontramos a Hayley Mills, interpretando a la Dra Josephine Grant, la encargada de atrapar al asesino o a Alison Pil, dando vida a Rachel, la esposa de Cooper.

¿Verdad que el argumento mola? Llama la atención y pinta interesante. Pero se queda ahí. Tan solo se salvan sus primeros cuarenta minutos, y, una vez alcanzados, la cinta va cuesta abajo y sin frenos. Lo que es una pena, puesto que se le podía haber sacado mucho más jugo. Mientras visionaba la cinta, no le di importancia a unos cuantos detalles, pero, una vez acabada la proyección, empecé a repasar algunos de los, múltiples, agujeros que tiene la trama. Lo que hizo cabrearme aún más.

No es la primera vez que Shyamalan me engaña. Ya lo hizo en sus dos últimas propuestas, cuyas reseñas podréis leer aquí y aquí. Ya poco queda de aquel cineasta que logró sorprender a las audiencias de todo el mundo, con El sexto sentido y El protegido, sus dos mejores trabajos sin duda. Ahora, parece que corta la mayor parte de sus producciones por el mismo patrón. Con un giro de guion que intente sorprender, lo que ya parece ser su marca de fábrica. Pero alguien debería decirle que eso ya no funciona tan bien como antes.

Esto es algo que cabrea. Puesto que el punto de partida es prometedor, pero se queda en agua de borrajas. Y eso a pesar que cuenta con una buena interpretación de Harnett, cuyo rol como psicópata está bastante bien llevado. Sabe ser amenazador y encantador a la vez, pero, en los instantes finales, parece olvidarse de su actuación contenida, y nos ofrece alguna que otra cara de loco y muecas que echan al traste lo que había hecho hasta ahora.

Es de lo poco que salvo de la película, el resto es para olvidar. No hay tensión, no hay emoción alguna. Shyamalan visita terrenos que antes se nos habían mostrado en thrillers con asesinos en serie de por medio. De acuerdo hazlo, pero si me cuantas una historia que se ha contado antes, hazlo de una forma que resulte interesante para la audiencia.

Ya he dicho que salí cabreado de verla, algo que me ha pasado muy pocas veces cuando salgo de ver una película. Pues bien, Shyamalan lo consigue. No sé como se las apaña, y eso que ya iba con la mosca detrás de la oreja, a tenor de las críticas que iban saliendo. Si bien no tiendo a hacerles caso, a la hora de enfrentarme al realizador de Múltiple, ya iba sospechando.

No voy a reventar nada de la película, pero es que a nada que te pongas a rascar o a pensar, incluso mientras la estás viendo, no se sostiene por ningún lado. Es cierto que hay que dejarse llevar por la incredulidad, pero es que aquí el director trata a la audiencia como si fuera zote directamente.

Hay cosas mejores en las que perder la hora y cuarenta que dura la película. Yo no os la recomiendo ver, y, si lo hacéis, es bajo vuestra cuenta y riesgo.

A continuación, el tráiler:



lunes, 5 de agosto de 2024

libro: Todo sobre mí

 Los aficionados al cine cómico tienen varios referentes, ya sea en su época muda como sonora. Así, nombres como Charles Chaplin, Buster Keaton, Stan Laurel y Oliver Hardy, los Monty Python o Mel Brooks, por citar algunos ejemplos, causaron, y lo siguen haciendo, no pocas carcajadas a los espectadores. Precisamente, es el último nombre el que protagoniza la entrada de hoy, un guionista y director que ha filmado algunos de los filmes más divertidos de la historia del cine.

Escrito por Mel Brooks, esta autobiografía supone un recorrido por su vida, desde sus primeros pasos como guionista en televisión y su debut como director en Los productores, hasta su posterior consagración con las diferentes producciones en las que intervino y su faceta como productor. A lo largo de sus casi 500 páginas, Brooks no se deja nada en el tintero, y lo hace con un estilo bastante ameno y divertido.

Si bien ya conocía alguna que otra anécdota de Brooks, ese libro me descubrió bastantes más y de como, a lo largo de su carrera, se fue relacionando, de una manera u otra, con algunas de las personalidades más destacadas de la historia del cine. Baste citar como ejemplo, que Dustin Hoffman estuvo a punto de protagonizar Los productores, en el rol que finalmente acabó protagonizando Gene Wilder, ya que justo en el momento de protagonizar el film de Brooks, se salió la oportunidad de protagonizar El graduado junto a Anne Bancroft, esposa de Mel Brooks. El resto, como se suele decir, es historia.

Los primeros capítulos de su autobiografía, que nos relatan su infancia, adolescencia y su época militar en la segunda guerra mundial, nos descubren a un Brooks algo más serio e intimista, pero que no deja de lado el humor. Estos episodios suponen una buena carta de presentación, ante lo que luego se irá desarrollando, en donde ya empieza a surgir el Brooks travieso y divertido que conocemos.

A lo largo de sus páginas, y en no pocas ocasiones, Brooks deja de lado la narración que nos está contando, para hacer un breve inciso y contar una anécdota que, de alguna u otra forma, guarda relación con lo que nos está costando. Es decir, más o menos lo que solemos hacer nosotros cuando estamos tomando algo con nuestros amigos, y de repente nos acordamos de algo que está relacionado con lo que estábamos diciendo. Baste citar como ejemplo, cuando nos está narrando un episodio que tuvo lugar durante la segunda guerra mundial, su estancia en una casa francesa y su relación con el hijo de los dueños, y de como, años después, volvió a Francia y su reencuentro con este niño años después mientras estaba produciendo El hombre elefante.

Durante la mayor parte de su biografía, Brooks nos mantiene con una sonrisa en la boca permanente, y, de vez en cuando, se nos escapará alguna carcajada que otra. Ya sea por la forma en que cuenta la historia, o porque visualizamos la escena de la película que nos está contando.

Al tratarse de su vida, nos vamos a encontrar con no pocas fotografías de su álbum de recuerdos, en donde comparte plano con sus padres, hermanos, amigos, compañeros que estuvieron con él en la segunda guerra mundial, con su pareja, familia, colegas de trabajo, lo cual nos permite apreciar, aún más si cabe, al realizador de El jovencito Frankenstein.

La sensación que a uno le queda, después de haber finalizado la lectura del libro, es que Brooks, a pesar de sus éxitos y premios, sigue siendo una persona humilde y amable, sensación que se confirma si uno ve las entrevistas que circulan por internet. Es una persona con la que uno se puede sentar a tomar algo, y sorprenderse con las cosas que sabe del mundo del cine.

Y es que, para los aficionados al séptimo arte, este libro es una gozada que se disfruta de principio a fin. No solo nos permite descubrir mejor la figura de un gran cómico, sino también a alguien que nos desvela como funcionan los entresijos del séptimo arte, ya sea desde sus batallas con los productores, que las ha tenido a lo largo de su carrera, hasta llevar a cabo rodajes sin pasarse demasiado del presupuesto que tenía asignado.

Tanto si sois seguidores de Brooks, como si queréis saber más sobre su figura, es un libro que no debéis dejar pasar. Sus capítulos no suelen ser muy extensos, pero, cuando hayáis acabado un episodio querréis seguir leyendo para saber como continúan las peripecias de este cómico que ha hecho reír durante generaciones a un buen número de espectadores.

domingo, 4 de agosto de 2024

película: Longlegs

El pasado viernes, se estrenó una cinta de terror a la que el público en general, entre los que me incluyo, tenía bastantes ganas de ver, no solo por el argumento, sino por la interpretación de Nicolas Cage, actor al que tengo en bastante estima. Antes de ir a verla, no fueron pocas las críticas negativas que hicieron que las expectativas que tenía puestas en el film, se enfriaran ligeramente. Pues bien, una vez vista, he de decir que no solo no se enfriaron, sino que además se vieron superadas. Así pues, veamos que se esconde detrás del argumento de una de las producciones de horror más esperadas del año.

Escrita y dirigida por Oz Perkins, la trama nos cuenta como Lee Harker, Maika Monroe, joven e inexperta agente del FBI es asignada por Carter, Blair Underwood, su superior al mando para que investigue que se oculta tras el asesinato de diversas familias a lo largo de los años, en el que parece estar implicado el misterioso asesino conocido como Longles, Nicolas Cage. A medida que la investigación avanza, Lee se dará cuenta que hay un vínculo que le une al psicópata.

Increíble, no se me ocurre otra forma de definir al film. Producción que bebe de diversas fuentes como El silencio de los corderos, Twin Peaks o Zodiac, por citar algunos de los ejemplos que a uno se le viene a la cabeza. Tal y como se puede ver por el argumento, Perkins no cuenta nada que no hayamos visto antes. Pero, es la forma en la que lo cuenta, lo que hace que no despeguemos los ojos de la pantalla en ningún momento.

Lo primero que hay que destacar, es la atmósfera que rodea al film. Da bastante mal rollo, sobre todo en algunos momentos protagonizados por nuestra protagonista. En no pocos instantes, la fotografía va a jugar un papel esencial, sobre todo desde el momento en que la investigación se vaya haciendo más inquietante y Lee se vaya acercando a la verdad.

Otro de los aspectos a destacar, es que el realizador apenas utilizada los jumpscares, es decir, aquellos sustos que se producen haciendo que el espectador salte de la butaca, mediante el consabido uso de la música, o la aparición inesperada del asesino. Aquí no vais a encontrar nada de esto, pero a cambio obtendréis un thriller de terror donde importa más la historia y los personajes, que el uso de la sangre y muertes violentas. Que haberlas haylas, pero no son lo importante. Salvo un par de instantes, la hemoglobina brilla por su ausencia. Eso sí, en el momento en que hace acto de aparición, impacta. 

Pero, si algo hay que destacar, es el papel de Cage. Es en un rol secundario, pero con bastante chicha. Apenas es reconocible, debido a la tremenda caracterización. La cual, ha sido objeto de no pocas burlas por la comunidad cinéfila diciendo que era chanante, y que parecía una de las imitaciones llevadas a cabo por Joaquín Reyes. Nada más lejos de la realidad.

Cuando uno ve aparecer a Cage, queda sorprendido. Su aparición va siendo en pequeñas dosis, por lo que apenas le vemos del todo, por lo que causa impacto una vez se le ve ya del todo. Aquí el intérprete de Con air, se olvida de sus habituales histrionismos para ofrecer a la audiencia una actuación que se encuentra entre las mejores que ha hecho de un tiempo a esta parte.

En total, Cage aparece apenas 20 minutos en total de los 100 minutos que dura el film. Eso sí, los sabe aprovechar, y, en opinión de quien eso suscribe, la cinta va ganando en interés desde el momento en que aparece y, sobre todo, el momento de su cara a cara con Monroe en la comisaría.

Se suele decir que hay películas que hay que ver varias veces, para poder pillar todas aquellas pistas que se nos han pasado en su primer visionado. Aquí se cumple esa regla. Ya que hay varias pistas que Perkins, de forma inteligente, va sembrando a lo largo del metraje. Algunas de ellas se ven, pero otras pasan inadvertidas hasta un segundo o tercer visionado. De hecho, hay un hilo en Twitter con estas señales, pero el ponerlo sería reventaros la sorpresa, por lo que, como es costumbre en el blog, no lo pondré para que os sorprendáis.

Esta es de las ocasiones en las que, cuanto menos sepáis de una cinta, o menos avances hayáis visto, mejor. Yo apenas vi o sabía nada de su argumento, quería ir lo más ignorante posible a su visionado, lo que fue todo un acierto. Por lo que os recomiendo que, si la queréis ver, no entréis en Twitter o redes sociales, para esquivar los spoilers que ya andarán pululando.

Si os gustan las cintas de terror con buenas interpretaciones, atmosfera con mal rollo y una historia que os atrape, no lo dudéis y dadle una oportunidad. Seguro que no os arrepentiréis en absoluto.

A continuación, el tráiler:


Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

jueves, 1 de agosto de 2024

película: Su último combate

Ah los tiempos de videoclub y sus cintas de artes marciales de serie B, que buenos ratos nos hicieron, y siguen haciendo, pasar a los aficionados a este tipo de cine. Lo único que buscamos a la hora de su visionado, es que tenga buenas coreografías, un protagonista con carisma y un villano que no le ande a la zaga, mozas de buen ver y, sobre todo, secuencias de entrenamiento épicas y con una canción que acompañe a ese momento. Pues bien, todo esto es lo que nos vamos a encontrar en la entrada de hoy, un sincero homenaje a este tipo de films.


Dirigida por Ross W. Clarkson, que se encarga del guion junto a Sean David Lowe, la trama nos cuenta como el karateka Mike Rivers, Mathis Ladwher, es obligado a luchar por el mafioso Ron Hall, Matthias Hues, en un torneo clandestino de artes marciales en Europa del este, en el que no solo puede ganar un millón de dólares, sino también recuperar a su hija Bree, Kira Kortenbach. Al llegar a su destino se encontrará con otros luchadores, entre los que se incluyen Lea, Monia Moula, y Damon, Kurt McKinney, que también han sido coaccionados por el mafioso.

A los intérpretes arriba citados, hay que destacar la aparición de Billy Blanks en el rol de Loren, que entrenará a Mike; Cynthia Rothrock como Julie, la que fuera mentora de Dracko, Mike Derudder, y que trabaja bajo las ordenes de Hall como el luchador final a batir; Michel Qissi como Wolf, guardaespaldas del mafioso y Abdel Qissi dando vida al detective Dobrev.

Tal y como podéis ver por el argumento, no hay nada nuevo bajo el sol. Sus creadores no se estrujaron mucho el cerebro a la hora de crear la trama. Lo que nos cuentan, es algo que hemos visto más de una vez en este tipo de films, entre los que podemos encontrar clásicos como Contacto sangriento, Bloodfist o Solo el más fuerte. Por lo que si disfrutasteis de éstos títulos, sin duda también lo haréis con la entrada de hoy.

Hay que reconocer que en su reparto nos encontramos con algunos de los nombres que son clásicos dentro del cine de artes marciales. Desde Cynthia, protagonista de clásicos como China O' Brien o Ley marcial; Billy Blanks, que protagonizó El rey de los kickboxers; Kurt Mckinney, reconocido por su rol en Retroceder nunca, rendirse jamás; Michel Qissi, inolvidable Tong Po en Kickboxer; Abdel Qissi como el enemigo final de The Quest o el propio Hues, quien demostró sus habilidades marciales en Cazador sin ley o Cinturón negro.

Tal y como podéis ver, en el aspecto marcial han jugado sobre seguro, por lo que la espectacularidad de las coreografías está más que asegurada. Al protagonista no le conozco, pero tengo que reconocer que el tío sabe como moverse, lo mismo se puede aplicar a la única chica del reparto que no tiene problema alguno en repartir estopa a sus compañeros de reparto femenino.

Incluso para hacer la cinta más ochentera, incluso nos encontramos en la banda sonora con Stan Bush, que convirtió en Fight to survive, que aparecía en Contacto sangriento, en todo un himno dentro de la serie B. Y en la parte instrumental del film está Paul Hertzog, que se encargó de la partitura de Kickboxer y de la ya citada Contacto sangriento. Es decir, han ido a lo seguro contando con la ayuda de estos dos grandes artistas.

Si tuviera que ponerle una pega, es que las peleas tardan en llegar, y se producen en los últimos minutos de la cinta. Eso sí, la espera merece la pena, ya que cuando vemos en acción a nuestros protagonistas repartiendo estopa, decidimos perdonar el tiempo hasta que suceden las peleas. A cambio, nos encontramos con secuencias del entrenamiento de Rivers a cargo de Loren y Julia, a ritmo de Bush. 

A este tipo de films, se les acusa, no sin razón, de ser más simples que el mecanismo de un chupete. No seré yo quien le quite parte de razón a sus detractores, pero, que demonios, uno sabe que se va a encontrar cuando visiona este tipo de producciones. Interpretaciones justas, frases simples, un malo muy malo, al que queremos ver morder el polvo, y un bueno muy bueno. Es decir, el ABC del cine de artes marciales de serie B.

Esta película esta hecha desde el cariño, y como forma de homenaje, a todos los intérpretes, y películas, que nos hicieron pasar buenos ratos. Esto es algo que se agradece. Incluso uno puede echar en falta a otros actores míticos de este tipo de cine, como Bolo Yeung, pero tenemos a su hijo; Jeff Speakman o Don "el dragón" Wilson, y que sin duda hubiera sido curioso ver. Pero, a los que aparecen, no hay que poner pega alguna. Demuestran que, a pesar de sus años, estar en plena forma.

Si sois seguidores del cine de artes marciales, no lo dudéis y dadle una oportunidad, seguro que no os arrepentiréis. Además, su duración es de 105 minutos, por lo que no se hace pesada.

A continuación, el tráiler:

Espero que os haya gustado la entrada de hoy.