lunes, 10 de marzo de 2025

libro: Extraños eones

Cuando Lovecraft comenzó su andadura como escritor, lejos estaba de imaginar la enorme influencia que iba a ejercer no solo en los autores contemporáneos suyos, sino también en los que vinieron después. No son pocos los creadores de terror que, de alguna u otra forma, han querido rendir homenaje al padre de los primigenios. Algo que se aprecia de forma bastante evidente en la entrada de hoy.

Escrita por Emilio Bueso, autor que ya ha aparecido por aquí en otras ocasiones, la trama nos cuenta como en "La ciudad de los muertos" de El Cairo, 5 adolescentes están a punto de vivir una aventura en la que el destino del mundo está en juego. Pero no estarán solos, puesto que dos jóvenes intervendrán también gracias a una llave de plata heredada por el abuelo de uno de ellos.

Madre mía, aún no me explico la razón por la que tardé tanto en leer esta novela. Uno de los mejores homenajes a Lovecraft que he leído, no solo por la forma en la que está escrita, sino también por como utiliza el mito de los primigenios y lo lleva a su propio terreno.

Una forma sencilla de resumir el libro, sería que Los Goonies conocen a Lovecraft. Pero es que hay mucho más. Por supuesto, que a uno se le viene a la mente la inmortal pandilla de amigos cada vez que uno lee una obra protagonizada por una cuadrilla de adolescentes. Pero es que aquí, todos ellos son un grupo de mendigos, que sobreviven como pueden en las duras calles de El Cairo, en las que se ganan la vida como pueden y tan solo se tienen los unos a los otros.

De forma inteligente, Bueso nos va presentando a cada uno de los adolescentes. Sabemos como se ganan la vida, e incluso nos da un pequeño destello de su pasado y de como acabaron en las calles. También como se ganan la vida. De esta forma, uno les va cogiendo aprecio y sabe que, a pesar de que sean unos golfillos, no tienen un mal fondo.

Poco a poco, se nos van desvelando las piezas. Uno puede intuir, lo mismo que los protagonistas, que algo raro ocurre cuando unos extraños hombres llegan al panteón donde ellos viven y sucesos extraños se suceden. Al principio parecen nimiedades, pero estos pequeños detalles son esenciales ante lo que está a punto de suceder.

Este es un claro ejemplo de que una buena trama, unida a un gran misterio por resolver, basta para mantenernos enganchados desde sus primeras páginas. Bueso sabe de esto, puesto que a lo largo de sus obras, sus argumentos son el punto fuerte de cada una de sus obras. El autor de Cenital va creando una atmósfera que, a medida que avance la trama, se irá haciendo más y más agobiante.

Algo que se confirma, cuando entran en escena los jóvenes españoles, que han heredado una misteriosa llave de plata, tras el fallecimiento de uno de ellos. A medida que van descubriendo más pistas, solo sirven para que el misterio no solo no se aclare, sino que se vaya volviendo más turbio. Algo que se confirma cuando todos los protagonistas se conozcan al fin.

Si bien el autor no mete muchas muertes, en el momento en que estás hacen acto de presencia nos dejan estupefactos. No solo por el impacto en el devenir de los acontecimientos, sino también por lo inesperado de las mismas. Además, cuando lo hacen, Bueso no se recrea en ellas. Si tuviera que establecer una comparación, sería con el cine. Los fallecimientos ocurren fuera de cámara. Uno sabe lo que ha pasado, pero no se muestra. 

Uno de los momentos que más me gustaron del libro, fue cuando hace acto de presencia Nyarlathotep y el mundo en el que vive. La manera en la que está descrito, con un ambiente oscuro, lleno de seres de pesadilla, además del susodicho primigenio y que tiene tras de sí un velo que es el que amenaza con traer el caos a nuestro mundo.

Si os gustan las narraciones ambientadas en Lovecraft, ésta es una lectura obligatoria. La historia de los primigenios que quieren conquistar nuestro mundo, no es original. Lo hemos visto en otras narraciones, además de las originales del escritor de Providence. Pero lo importante es la forma en que lo cuentas, lo que hace que la historia sea más o menos atractiva para los lectores. Bueso no es que lo haga atractivo, es que nos invita a seguir leyendo más y más capítulos. Lo que es una putada. Uno quiere seguir avanzando en la historia, pero sabe que cuanto más avance, menos le queda de disfrutar del libro.

Tanto si os gusta Lovecraft, como las historias de terror que no necesitan mucha sangre para mantenernos enganchados, no lo dudéis y haceros con el libro ahora que se ha reeditado. Seguro que no os arrepentiréis.


lunes, 3 de marzo de 2025

libro: El filo de la espada. El reino de la noche II

Tal y como avancé hace unas entradas, hoy vuelve un escritor que, de un tiempo a esta parte, se está convirtiendo en un habitual de este blog. En esta ocasión, regresa para ofrecernos la continuación de una saga de fantasía llena de aventuras, emoción y no pocas intrigas. Así pues, veamos que nuevas peripecias le aguardan a este inmortal y a sus amigos.

Escrito por Pablo Carnicero de la Cámara, e ilustraciones a cargo de Third guy studio, la trama arranca poco tiempo después de los sucesos narrados en inmortal. Urabi tendrá que hacer frente no solo a un nuevo enemigo, que amenaza con destruir el velo, sino también a diversas intrigas que quieren hacer desaparecer la orden a la que pertenece. Todo ello mientras la cuarta cruzada se vislumbra en el horizonte.

Interesante secuela que, sin llegar a alcanzar el nivel mostrado en inmortal si que cumple con el objetivo con el que fue escrita, que no es otro que el de entretener a los lectores. En esta ocasión, Pablo introduce más intrigas palaciegas, a la vez que nos presenta a un misterioso personaje, tan solo conocido como El monje que se mostrará como una gran amenaza, y que seguro que aparecerá en un futuro en esta saga. 

Aquí, esta misteriosa figura pondrá en no pocos aprietos a nuestros protagonistas. En no pocas ocasiones mostrará su nivel de inteligencia, manipulando tanto a aliados como enemigos. Aquí maneja los hilos, pero no sabremos del todo cual es su objetivo final. Lo que si sabemos, es que Pablo ha creado a un personaje lo bastante enigmático e interesante, para hacernos querer saber sobre él mismo y que nuevas faenas le tiene preparadas a futuros enemigos.

Otro de los enemigos que molan es Galad, el hermano gemelo de Urabi. Tiene para si algunos de los mejores momentos del libro. Es el reverso oscuro del protagonista, ya que tiene sus mismas habilidades pero sin la humanidad o sentimientos que caracterizan al inmortal. Su aparición supone una sorpresa, ya que no se sabía nada de él. Además, que tiene en su posesión un arma que causa no pocos quebraderos de cabeza a Urabi, ya que es la única capaz de acabar con los inmortales.

Es este arma, la que hará que el protagonista vea la muerte más cerca que nunca y que su inmortalidad se vea comprometida. Algo que se demuestra en una batalla contra un demonio, que porta la susodicha y que le demostrará que las leyendas que corrían sobre la misma, eran ciertas.

Las escenas de intrigas aquí cobran más protagonismo, no serán pocas las ocasiones en las que veamos a los conspiradores para ser los ganadores según sus intereses. Aquí la influencia de Juego de tronos es evidente, ya que uno no puede evitar acordarse de los juegos de Tyrion y cía para llevarse el gato al agua.

Si bien no tenemos muchas escenas de acción, las pocas que nos encontramos a lo largo del libro merecen la pena, destacando la ya mencionada de Urabi contra el demonio, sin desmerecer el duelo contra su hermano y, por supuesto, la batalla final contra el vampiro que amenaza con destruir el mundo tal y como lo conocen los protagonistas del libro.

También hay un par de giros de guion bastante interesantes, el regreso de un personaje que ya había aparecido en la anterior entrega y cuya aparición resulta inesperada. Sobre todo por el modo en que lo hace.

El final, que por supuesto no voy a desvelar, es triste, pese a que sabemos su conclusión desde un determinado instante. Pero aquí no hay ningún milagro, o Deus ex machina que salve a un personaje. Su destino está sellado y lo afronta con la mayor valentía posible.

Las ilustraciones que acompañan al libro, siguen siendo bastante chulas. Si tuviera que escoger una, sería la del demonio saliendo de las llamas vestido con una armadura y dispuesto a la batalla. Da sensación de amenaza, y de un temible enemigo al que costará derrotar.

Si os gustan las novelas de fantasía, con toques de terror y acción, y, si además queréis saber como continua la saga, no lo dudéis y haceros con el libro. Os mantendrá entretenidos y os, y me dejará, con ganas de saber como continua la historia, cuya tercera entrega espero que no tarde en leer y en reseñar.

Espero que os haya gustado la entrada de hoy.

sábado, 1 de marzo de 2025

película: A complete unknown

Ayer se estrenó la nueva cinta de James Mangold, y que es una de las candidatas a los premios de la academia que se celebrarán mañana. Un film bastante interesante, que supone la vuelta del realizador de Logan a los biopics musicales tras En la cuerda floja, la biografía de Johnny Cash que tiene aquí un pequeño rol. Así pues, veamos que nos tiene que contar el director sobre la vida y milagros de Bob Dylan.

Dirigida por James Mangold, que se encarga también del guion junto a Jay Cocks, que adaptan el libro Dylan goes electric de Elijah Wald la cinta supone un recorrido por los primeros años de Bob Dylan, Timothée Chalament, desde su llegada a Nueva York en 1961 hasta su polémica actuación en el festival de Newport en 1965. A lo largo de estos años, entablará amistad con Pete Seeger, Edward Norton, que le ayudó a dar el salto y descubrirá el amor junto a Sylvie Russo, Elle Fanning, a la vez que entabla una relación con Joan Baez, Monica Barbaro.

Además de los intérpretes arriba mencionados, en el reparto también nos encontramos con Boyd Holbrook, en el rol de Johnny Cash; Dan Fogler dando vida a Albert Grossman, el manager de Dylan o Scott Mcnairy como Woody Guthrie, que tendrá un rol esencial en el devenir musical de Bob Dylan.

Los amantes de los biopics musicales, entre los que me incluyo, teníamos la fecha de ayer marcada en el calendario. No solo por el estreno en sí, sino también por ver si la interpretación de Chalament le hacía ser merecedor de la nominación o no. Una vez vista, tan solo queda afirmar que hace un muy buen rol como Dylan, a pesar que la cinta no deja del todo bien al creador de himnos como Times are changin' o Blowing in the wind, por nombrar dos ejemplos.

Si ya los aficionados al rock y al folk, teníamos una idea de Dylan como una persona huraña, seca y creída, el film no hace sino confirmar esa impresión. No son pocos los momentos a lo largo del metraje, en los que Dylan queda reflejado como un autentico capullo. Alguien que no supo gestionar su meteórico ascenso a la fama, y que miraba por encima del hombro a no pocas personas. Incluso a aquellos que lo querían de verdad, y que estuvieron allí cuando era un completo desconocido.

Varios son los momentos a destacar. Uno de ellos, y sin duda uno de mis favoritos, tiene lugar hacía mitad de metraje durante el festival de Newport en 1964. Allí, una vez que Dylan ha terminado su actuación, la mirada y su postura corporal cambian por completo. Ha dejado de ser ese joven timorato para convertirse en alguien distinto, lo que se confirma en la siguiente secuencia.

Hace dos años, tuve la oportunidad de ver a Dylan en concierto y, si bien volvería a repetir la experiencia en un futuro si se da la oportunidad, la sensación que me dejó fue de alguien huraño y que reniega, por así decirlo, de las canciones que le dieron la fama. Algo que se muestra en un determinado momento del film, cuando se niega a cantar junto a Baez Blowin in the wind.

Esto es algo que no entiendo, son este tipo de canciones los que te llevaron a estar donde estas y ahora no te gusta tocarlas. Es como si renegaras de tu pasado, y, si tienes la suerte de que la toca, la va a cambiar de tal forma que hasta los seguidores más acérrimos del cantante, les va a costar reconocerla. Es como si Springsteen o los Rolling, se negasen a tocar en sus giras temas como Born to Run o Satisfaction, sabiendo que la gente espera que suenen puesto que son de sus temas más reconocidos.

Pero, volviendo a la cinta en sí, Mangold demuestra que le tiene cogida la medida a los biopics musicales. Tanto en su aproximación a la vida de Johnny Cash, como aquí, nos presenta a unas figuras que no son perfectas y que tienen sus propios demonios. Aquí, el realizador de Ford vs Ferrari, nos presenta a Dylan como alguien al que le hace falta mucha comprensión y amor, pero que cuando lo consigue, no es capaz de mantenerlo y actúa como si todo el mundo le debiera algo.

Chalament está de dulce, pero lo mismo se podría decir de sus compañeros de reparto. Norton nos ofrece aquí uno de sus roles más amables, volviendo a demostrar que, cuando se le da el proyecto adecuado, es uno de los mejores actores de su generación. En cuanto a Barbaro, su caracterización como Baez es impresionante, por lo que la nominación de ambos está más que justificada.

Una vez acabada la proyección, comenté con mi acompañante que tanto los personajes de Norton como Chalament tenían razón en sus posturas. El primero al querer ser fiel a sus principios al folk, por lo que representa. En cuanto al segundo, supo ver más allá del género musical y supo evolucionar, metiendo guitarras eléctricas y bandas, lo que valió no pocas críticas en su momento. Ambas posturas chocan en los últimos instantes del film.

Pese a su duración, cercana a las dos horas y media, el realizador sabe mantener la atención del espectador en todo momento. Cierto es, que de vez en cuando, se produce un pequeño bajón en el ritmo, pero estos instantes son escasos. A cambio, Mangold nos regala no pocos instantes musicales, en los que Chalament da muestras de su talento vocal.

Si tuviera que ponerle alguna pega, es que la cinta solo muestra una pequeña parte de la vida de Dylan, tal y como hace el libro de Wald. Pese a que una vez que acaba la película se nos muestra mediante carteles lo que sucedió con sus protagonistas, no hubiera estado mal que se hubiera explayado algo más en este aspecto.

Una buena cinta biográfica, que supone una aproximación a los primeros años de una de las figuras esenciales de la música de los años 60. Un cantante que, a pesar de su carácter huraño, nos ha regalado himnos musicales que forman parte de la historia de la música.

Tanto si os gusta la figura de Dylan, como los biopics musicales, es una película que no deberíais dejar pasar.

A continuación el tráiler:


 Espero que os haya gustado la entrada de hoy.