libro: choca contra el sol. Cazador a sueldo 2

Hoy de nuevo vuelve a aparecer por el blog un asesino a sueldo un tanto peculiar. Después de su primera aventura, ya reseñada aquí nos volvemos a encontrar con nuestro protagonista, en una nueva peripecia que volverá a poner a prueba sus habilidades. Desde aquí agradecer al autor el ejemplar de cortesía, con el que ha sido posible realizar la reseña de hoy.

Escrito por Alexis Brito Delgado, la trama nos cuenta cómo tras una misión que está a punto de  costarle la vida, Mohler Stark se retira a vivir una plácida vida en Luisiana. Pero es complicado dejar el pasado atrás, y más cuando viene a buscarte cuando te creías a salvo.

Se suele decir que segundas partes nunca fueron buenas, algo que, por fortuna, no ocurre aquí. Ya desde las primeras páginas, el autor nos atrapa y ya no nos suelta hasta que finalizamos la lectura, o paramos para tomar un respiro.

El Stark que aquí nos encontramos ha evolucionado como personaje. Sigue siendo un cabronazo de tomo y lomo, pero al menos aquí demuestra tener algo parecido a sentimientos y empatía, por aquellos que han compartido parte de su vida en su retiro y bajo una nueva identidad.

El ambiente mostrado por el autor, dista mucho de ser el ideal para visitar si eres turista. Los lugares en los que se desenvuelve Stark, salvo uno, son bastante peligrosos y no están exentos de peligro para todos aquellos que se aproximan a los mismos.

Tal y como ocurría en su anterior aventura, un hecho hará que Stark vuelva a ser el asesino despiadado que conocíamos. E incluso se puede decir que su vendetta tiene un carácter personal, al enterarse de la muerte de alguien que era importante para él.

Las escenas de acción son escasas, eso sí, cuando aparecen te hace falta un paraguas de la cantidad de sangre que aparece. Están narradas de forma explícita y cinematográfica, de forma que a uno le parece estar viéndolas sobre una pantalla.

Uno de los detalles que más me gustó, además de las escenas de acción antes mencionadas o del personaje, fue la aparición de diversos nombres reales de mafiosos, ya que alguno de ellos resultarán conocidos para todos aquellos que, mediante películas o libros, tenemos algún conocimiento de este mundo. Baste citar como ejemplo el nombre de Tony Spilotro. Tal vez no os suene, pero si os digo Nicky Santoro, interpretado por Joe Pesci en Casino, puede que os suene más.

La novela es bastante cruda y no muy apta para aquellos que se asusten con lenguaje bastante soez, escenas de sexo explícito y una violencia que no desentona en el cine de acción de serie b más bestia y salvaje.

El final, que por supuesto no voy a desvelar, nos deja con ganas de más aventuras de Stark. Ya que es un personaje que mola. Es un cabrito sí, pero aún así la forma en la que el autor nos describe sus peripecias, hace que queramos saber más del personaje. Más cuando aquí se nos dan pequeñas pinceladas acerca de su pasado.

Pero si disfrutáis con la literatura negra que de suele salir de lo habitual, o si os gustan aquellos títulos poco conocidos pero que nos deparan alegrías, no lo dudéis y haceros con el libro. Seguro que no os arrepentiréis. 

libro: Demons Omega

En 1985 se estrenó Demons, dirigida por Lamberto Bava, una cinta que cuenta con un gran número de seguidores, entre los que me incluyo. Y tan solo un años después nos llegó su secuela. Los fans de esta saga estuvimos esperando durante años que se filmara una tercera parte, que, por desgracia no se llegó a rodar. Pero que ahora, gracias a Applehead, podemos disfrutar en forma de novela. Así pues, afilemos de nuevo nuestras katanas para enfrentarnos a estos demonios una vez más.

Basada en el guión de la tercera parte escrito por Bava, con un prólogo a cargo de Pedro José Tena, autor del ensayo sobre la saga que podéis ver reseñado aquí y adaptada por Pablo García Naranjo, la novela nos narra lo que ocurre 35 años después de los sucesos de la primera entrega, cuando un grupo de diferentes personas son invitadas a una isla por un millonario. Lejos están de imaginar la pesadilla que está a punto de comenzar.

Increíble, no se me ocurre otra palabra mejor con la que definir el libro. Tal y como ocurriera en la primera parte, el autor nos va presentando a los personajes que serán protagonistas de lo que está a punto de pasar. Se toma su tiempo para que los vayamos conociendo, tanto a los villanos como a los héroes, o heroínas.

La acción se va cociendo poco a poco, hasta que en un determinado suceso, que por supuesto no voy a desvelar, hace que rompa a hervir. Y llegados a este momento, empieza la chicha y lo que los aficionados a esta saga esperamos: sangre, vísceras, cuerpos desmembrados y saber que protagonistas llegarán al final de la aventura.

Desde luego que la espera ha merecido la pena. Pese a que no lo hayamos podido ver en pantalla, la forma en la que Naranjo traslada el guión de Bava nos hace visualizar todo. Como si las imágenes desfilaran ante nuestros ojos, y uno no puede evitar preguntarse si alguna vez podremos ver esto trasladado con un realizador e intérpretes, puesto que se presta a ello.

Por las páginas del libro, no solo veremos homenajes o guiños a sus predecesoras, sino también a otros nombres clave del horror transalpino. De esta forma, se establece una especie de juego entre el autor y los lectores, para comprobar si es capaz de detectarlos. Uno está bastante claro, mientras que los otros quedan a la imaginación de los leyentes.

Varios son los momentos a destacar: el que inicia todo, la primera matanza, y, sobre todo, la revelación del millonario. En ese instante mi mandíbula se abrió, una sensación de alegría y nostalgia me invadió. Fue algo totalmente inesperado, y demuestra el amor que Bava le tiene a esta saga, que consigue que suba más enteros entre sus seguidores.

Por si no fuera suficiente, el libro tiene unas ilustraciones maravillosas obra de Marc Gras, quien ha sabido captar perfectamente la esencia de las palabras de Bava y Naranjo. Son unos dibujos simples, pero que consiguen que se nos dibuje una sonrisa en el rostro al volver a ver las siluetas de estos demonios una vez más.

Sé que puede resultar redundante, pero es que Applehead no para de darnos alegrías, ya sea con la publicación de este tipo de novelas, o con sus ensayos. Son volúmenes escritos para gente que ama el cine, y que sin utilizar un lenguaje demasiado técnico, nos engaña. Los autores suelen emplear un lenguaje coloquial, lo que sin duda favorece su lectura.

Tanto si sois fans de la saga, como del terror más bestia, este es un libro de obligatoria lectura.

libro: Bud. Un gigante por papá

La figura de Bud Spencer es inmortal. Su innegable carisma, sus películas junto a Terence Hill o por separado, han hecho disfrutar a generaciones de cinéfilos. En la entrada de hoy, se permite a los lectores que se acerquen a este libro, la posibilidad de conocer al Spencer más íntimo y personal, visto a través de una de sus hijas, quien, mediante multitud de anécdotas, nos descubre a un Bud que no se alejaba demasiado de sus personajes vistos en la gran pantalla.

Escrito por Cristiana Pedersoli, el presente libro supone una verdadera delicia para todos los que somos seguidores de Bud. Mediante recuerdos, Cristiana desvela a los lectores como Carlo, verdadero nombre de Bud, era un gigante en todos los aspectos, no solo de tamaño, sino también de corazón.

Me resulta muy complicado no dejar salir a mi niño interior, y fan, de Bud a la hora de escribir estas líneas. Bud formó parte de mi infancia, y el ver sus películas, vuelve a transportarme a cuando era niño y las veía con mi padre. Incluso hoy lo sigo haciendo cada vez que ponen alguna de sus cintas en televisión. Y es que no importa el tiempo que pase, uno se sigue riendo en las mismas escenas y momentos, sin importar las veces que uno haya visto el film.

Cristiana permite a los lectores ver a un Bud que, tal y como he mencionado unas líneas atrás, no se alejaba mucho de sus personajes ficticios. En ocasiones era como un niño grande, y disfrutaba de las pequeñas cosas de la vida. Si bien ya conocía algunas cosas de la vida de Bud, este libro me ha permitido saber muchísimas más, y apreciar aún más, si cabe, su figura.

Dentro del libro hay historias emocionantes, dramáticas, tiernas y, por supuesto, hilarantes. Sobre todo alguna relacionada con las intenciones de Bud de ponerse a dieta. Mientras uno lo va leyendo no puede evitar que se le dibuje una sonrisa en la cara. Puesto que uno se imagina esa situación e, inmediatamente, lo visualiza en cualquiera de sus filmes cuando le quitaban comida, o no le daban la ración que él quería.

También Cristiana comparte con los lectores momentos de la vida de Carlo antes de convertirse en Bud. Como por ejemplo el momento en el que estuvo a punto de morir, o sus aventuras en la jungla sudamericana, y que parecen sacadas de una película. O también la inteligencia de la que hizo gala su padre en no pocas ocasiones a lo largo de su vida.

Uno de los momentos que más me ha gustado del libro, es cuando la autora nos cuenta lo que significó la figura de Bud para las personas, y la tranquilidad y emoción de la que hacía gala Bud al conocer a sus seguidores. Resulta muy emocionante, y consigue que se te ponga un nudo en la garganta, el momento en el que Cristiana narra el momento de la partida de su padre, y lo que sucedió durante su funeral.

El libro se complementa con algunas de las recetas favoritas de Bud, por lo que nos podremos sentir como él a la hora de prepararlas y degustar sus platos favoritos, que tienen una pinta estupenda todo hay que decirlo. Y, por si fuera poco, nos encontramos con fotos provenientes de Bud en su faceta más personal, ya sea en familia o en alguno de sus rodajes alrededor del mundo.

Una compra imprescindible para todos los seguidores de este inmoral intérprete. Una vez más agradecer a la editorial la publicación de este tipo de libros, que no hace sino confirmar la pasión que sienten por el séptimo arte, y que transmiten a sus lectores.

película: Morbius

Que bonita es la inocencia, nos permite creer que cualquier cosa es posible. Que Papá Noel viva en el Polo Norte, que exista el ratoncito Pérez, que existan las hadas o que Jared Leto sea capaz de hacer una buena película de superhéroes. Pero la realidad es bien distinta, y es que madre mía, que cosa más mala acabo de ver. Una cinta horrible, sosa, mal dirigida, con un guion con más agujeros que un queso Gruyere, y donde lo único que se salva, manda narices, son las dos escenas postcréditos y el villano interpretado por Matt Smith.

Dirigida por Daniel Espinosa, y con guion, por así decirlo, a cargo de Matt Sazama y Burk Sharpless, la trama nos cuenta como el científico Michael Morbius, Jared Leto, aquejado de una extraña enfermedad en su sangre intenta encontrar una cura para la misma. Pero al encontrarla se convertirá en un vampiro,e intentará controlar su sed de sangre a la vez que se convierte en un antihéroe.

A primera vista el argumento mola no. Pero nada más lejos de la realidad, la película es aburrida, un verdadero pecado tratándose de cine de superhéroes. Los efectos especiales parecen de hace treinta años y los consecutivos retrasos en su estreno da que pensar. Para ver lo que he visto, mejor que se la hubieran ahorrado. Han sido casi dos horas de mi vida perdidas, y eso no me cabrea, lo que de verdad me molesta es que en principio tenía buena pinta, pero todo se queda en agua de borrajas.

A medida que la trama avanza, los agujeros se van haciendo más y más grandes. Aquí no es que las situaciones pasen por que las ha hecho un mago. Aquí se ha reunido todo Hogwarts, Gandalf, Saruman, Radagast el pardo, Doctor Extraño, Juan Tamariz y el hechicero que aparece en las fiestas de cumpleaños de los niños. Si hubiera visto aparecer un elefante hecho con globos no me hubiera extrañado en absoluto, y por lo menos hubiera captado más mi atención.

Leto no resulta creíble en ningún momento como héroe de acción, se limita a poner caras tristes y de interés, o de estreñimiento o de pensar: ¿Pero en que cojones me he metido yo? Menos mal que por ahí aparecen Jared Harris, que sin duda se lo ha llevado calentito nianoniano, y Matt Smith, pasándolo en grande como el villano de la función. Su sobreactuación no molesta, es más, te saca del sopor que invade toda la película.

Por Osiris y por Apis, miradme miradme bien, 

Ahora os va a gustar la pinicula

Las escenas de acción, por así decirlo, resultan confusas, mareantes, y no se han esforzado nada en intentar coreografiarlas lo mejor posible. El director se limita a girar la cámara alrededor de los protagonistas y ya. Parece que Biodramina les haya pagado por hacerlas, ya que uno acaba mareado. No sabe lo que pasa, ni quien pega a quien, o quien va ganando.

No hay clímax final, y la cámara lenta, cuando aparece, en vez de dar sensación de molonidad, parece de coña. En vez de ralentizar lo que pasa, la imagen se queda quieta y lo que se mueve es el actor. Si fuera un film amateur te lo puedo comprar, pero es que estamos hablando de una producción de 75 millones, es decir, que pasta no les ha faltado.

Que lo mejor de una cinta sean sus dos escenas postcreditos da que pensar. Dan pie a una futura secuela, que, en caso de hacerse, esperemos que sea mejor que su predecesora y amplia el concepto de multiverso ya visto en la última entrega de Spiderman.

Puede que estemos hablando de una de las peores películas de superhéroes. Y que demuestra que hay que mantener alejado a Leto del cine de superhéroes. Es más, creo que con él se podrían hacer las tres reglas de los Gremlins:

1)  Que no vuelva intervenir en ninguna.

2) No dejarle entrar en Marvel o DC

3) Y más importante: por mucho que llore, por mucho que grite, nunca, nunca dejarle acercarse al cine de evasión.

El ver un documental sobre la reproducción de las amebas o ver crecer la hierba resulta más entretenido que ver esta hecatombe.

A continuación el trailer: